La Fiscalía Central de Investigación para la Atención deNiños, Niñas y Adolescentes informó en un comunicado que ambosniños han sido sometidos a diversas cirugías para restablecer suapariencia y movilidad.
La titular de esa fiscalía, Margarita Maguey Neria, refirióque el caso inició el 22 de diciembre de 2016, cuando policíaspreventivos encontraron a una menor de siete años de edad en lacalzada Ignacio Zaragoza, quien tenía múltiples heridas causadaspor golpes y marcas de haber estado encadenada. La niña refirióque su madre la había abandonado.
Las autoridades indicaron el pasado 8 de marzo que la presuntaautora de las heridas era la abuela de la menor de edad, una mujerde 54 años, quien había sido detenida el 3 de marzo por lesionesy privación ilegal de la libertad.
La mujer vivía en Ixtapaluca, Estado de México, y estaba acargo de otros tres menores de cinco, ocho y nueve años de edad,primos de la infante encontrada en Iztapalapa, quienes fueronllevados Centro de Estancia Transitoria para Niños y Niñas de laprocuraduría capitalina.
Gracias a ellos se supo de la existencia de un quinto primo decuatro años de edad, a quien creían muerto a causa de los golpes,torturas y malos tratos de parte de la abuela, pero fue localizadocon su madre biológica, hecho que fue dado a conocer el 16 demarzo.
El menor, que presentaba aún heridas como un brazo roto,calvicie a causa de golpes en la cabeza y señas de haber sidoencadenado, quedó a cargo de la procuraduría y se ampliaron loscargos contra la abuela, quien enfrenta un proceso penal por eldelito de privación ilegal de la libertad, en la modalidad decausar daño y lesiones; podría ser condenada hasta por 60 añosde prisión.
Este niño, que ya tiene cinco años de edad fue operado por undentista y está en espera de una cirugía de su brazo, el cual sefracturó hace más de dos años y nunca recibió atenciónmédica.
La niña de siete años de edad ha sido sometida a cincocirugías y aún faltan más, y se hará la revisión exhaustiva deun neurólogo, que permita valorar si hay o no secuelas por lasagresiones.
Ambos fueron inscritos a una escuela y puedan reintegrarse aactividades propias de su edad, son supervisados por un nutriólogopara que recuperen su peso y tienen atención de neurólogos,odontólogos, nutriólogos, internistas y cirujanos.
La abuela fue vinculada a proceso por un Juez de Control por eldelito de privación ilegal de la libertad, en la modalidad decausar daño y lesiones, por el que podría alcanzar hasta 60 añosde prisión.
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