Decenas de personas que tienen pacientes en el hospital general Dr. Carlos Canseco afrontan un doble calvario, esperar horas para conocer el estado de salud de sus enfermos y conseguir las medicinas en este día sin transporte urbano.
La señora Edith Romero explicó que su hija Salma Guerrero ingresó para tener a su bebé durante la madrugada sin permitirles acercarse a ella, además, tienen horas esperando en la banqueta del hospital sin saber cómo está.
"Nos pidieron medicamento y me fue muy difícil conseguirlo porque no hay transporte y no tenemos dinero para pagar servicio especial y nos resulta muy doloroso estar afuera aguantando el calor y la angustia de no saber qué sucede con mi hija".
La historia no es distinta con la de la señora Marisela Reyes quien al igual que otros familiares llevaron a su hijo desde la cuatro de la mañana, tras sufrir un accidente en motocicleta y desconocen cuál es su estado de salud.
"Estamos muy preocupados, no nos permiten ni acercarnos y debemos esperar en la banqueta de la avenida Ejército Mexicano y ya llevamos tiempo sin saber que está sucediendo".