Obligados por la pérdida de clientes locatarios de mercados porteños recurren a la entrega a domicilio y evitar la quiebra de sus micronegocios.
El potosino José Hernández dijo que con ayuda de sus trabajadores y hasta con servicio de aplicaciones hacen las entregas a casa de frutas y verduras.
Esta es una forma de evitar el cierre y la pérdida del empleo y muchos nos estamos sumando.
Dijo que en la semana pasada con el inicio de la cuarentena la gente multiplicó sus compras por miedo al desabasto y actualmente las compras promedian los 300 pesos por familia
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