Con 84 años de vida, Don Evaristo Cruz Vidal ha visto el desarrollo de Ciudad Madero y la escuela primaria que hasta antes de esta semana, se ubicaba en la colonia Benito Juárez, misma que actualmente es demolida para edificar otra nueva.
LOS TRES NOMBRES
Relata que en todos estos años además de su transformación en cuanto a los materiales de construcción, también se ha ido modificando en el nombre.
En 1943 llevó por nombre "Ignacio López Rayón", en honor al insurgente mexicano, secretario del cura Miguel Hidalgo y Costilla, que encabezó el movimiento de independencia, cuando era una edificación de madera y lámina.
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Era un espacio y de corredores amplios, teniendo su fin una madrugada al registrarse un dantesco incendio.
"Se llamaba Ignacio López Rayón, cuando la escuela era de madera, esa se quemó en la madrugada, nosotros vivíamos a lado y la encontramos envuelta en llamas y ya cuando llegaron los bomberos ya estaba quemado", expresó.
Posteriormente vuelven a reconstruirlo pero ya con el nombre de “Juan B. De la Garza”, con el que perduró por varios años.
UNA ESCUELA PARA NIÑAS
Don Evaristo señala que posteriormente es diseñada la enorme construcción de la escuela primaria, ya con el nombre de "Leona Vicario", que era exclusivo para niñas.
"La escuela estaba cerca pero solo era para niñas, por suerte a mi hijo mayor la tocó estar cuando la escuela la convierten en mixta, en el año de 1972", indicó.
DURANTE EL HURACAN HILDA FUE REFUGIO
En plena construcción a la zona llegó el huracán Hilda, lo que generó grandes inundaciones, siendo utilizado este inmueble como un refugio temporal.
"En el 54 la empezaron a construir, todavía no la terminaban cuando se vino el ciclón del 55 estaban los dos pisos pero le faltaban ventanas y puertas, fue refugio con lo del huracán, me llegaba el agua al pecho", citó.
Recordó que en esa época solo daban hasta el tercer año, "tenía solo dos maestros, el maestro daba clases a segundo y tercero y la maestra llevaba primero", externó.
ACABÓ UNA ÉPOCA
Finalmente durante esta semana culminará una época más de este plantel educativo con la demolición de todo el inmueble donde por sus pasillos corrieron cientos de niños y se contaron miles de historia.