El maíz es uno de los productos más comercializados en nuestro país; le hemos dado una y mil formas, pero en la zona nos distingue entre los productos ricos, rápidos y resabrosos: los troles. Y sí, aquí se dice “trole”, no “esquite”.
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Son abundantes los negocios de este giro, algunos ya con gran antigüedad y presencia en nuestra zona, como el localizado frente a la Unidad Deportiva de Ciudad Madero reconocido como “El rey de los troles” en esta parte del municipio petrolero.
El humo y el olor clásico de este manjar es popular en “Elotes Rey”, dirigido desde hace 30 años por su dueño y fundador Reynaldo Hernández, quien nos compartió un poco de cómo se inauguró este popular negocio.
“Ya tenemos 30 años sirviendo en esta parte, pero pueden ser más vendiendo troles, raspas y lo que está muy de moda: la gomichamoyada. Ofrecemos todo lo clásico de Ciudad Madero”, explicó el entrevistado.
Ya sea que pases por la avenida Tamaulipas en coche o camines por esta zona, el aroma de Madero huele a elote tierno y delicioso, un buen acompañante de regreso a casa; también como un regalito para la familia donde siempre es bien recibido.
Pero el negocio de don Reynaldo ha incursionado en nuevas creaciones para todas las temporadas del año, pues sus nuevas chamoyadas tienen esa temperatura y acidez ideales para refrescar una tarde de verano. Si buscas también algo para cuidar la figura, sus gazpachos de frutas son una opción viable luego de los tamales del Día de la Candelaria.
“Tenemos elotes cocidos, troles, se está manejando también la sopatrole, las papitas con elote que también es uno muy popular y aquí nos encontrarán”, detallo.
Lo cuestionamos sobre la inspiración y el nacimiento de su iniciativa para empezar a comercializar este producto, a lo que comentó nostálgicamente sobre sus inicios.
“Recuerdo por ahí de los ochenta, creo hay que ser agradecido, un señor que vendía se llamaba “Trole Miki” ahí surgió la idea y de ahí mucho empezaron a venderle de esa manera y eso les ha dado trabajo a muchas personas”, nos contó de manera anecdótica.
Afirmó que este negocio fue la semilla para mucha gente y don Reynaldo no ha perdido la oportunidad de seguir creciendo, no solo en esta parte de Ciudad Madero, ya que se le puede encontrar también sirviendo en eventos privados donde la gente reconocer como “Rey, el de los troles”.
“Pues para mí es un orgullo que gracias al trabajo se me reconozca y gente venga diario a comprarme en mi negocio” concluyó el entrevistado.
De lunes a domingo puedes visitar este negocio y degustar uno de los sabores extraordinariamente cotidianos como lo son los troles de la zona conurbada.