De los muchos premios que han caído en Tampico de la Lotería Nacional, Víctor Manuel Perales Guzmán, recuerda dos de manera especial, uno donde el cliente le dio de albricias un cachito y otro que por la pandemia se "cebo", pues en lugar de venderlo él en Tampico se tuvo que ofrecer en estanquillos de la Ciudad México, porque aún no se podían instalar los vendedores del puerto.
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La madre de Víctor fue la que empezó con la venta de los billetes en un lugar cerca de la esquina de la calle Aduana y Salvador Díaz Mirón, "allá por el año de 1929, había un tejabancito en un negocio y ahí se colocó, cuando yo nací, hace 67 años ya era un localito y de ahí fue mi familia la herencia de la venta de la Lotería Nacional, que durante muchos años fue un buen negocio".
Comentó que el sorteo especial de El Sol de Tampico es muy bueno, porque puede motivar a que la gente participe y eso nos la oportunidad de esta bonita costumbre de los tampiqueños de colaborar con la Lotería Nacional en bien de todos, es una alegría que se tenga a una empresa de la zona en los billetes.
Aún pasaban los tranvías y no existían las calles peatonales, añade, cuando ya teníamos la venta de los billetes, que le han dado grandes satisfacciones como la posibilidad de viajar hasta Europa y contar con un trabajo constante, además de ver la alegría de muchas personas que han sacado premios importantes incluyendo el mayor hace 5 años, donde él y su compañero fueron afortunados también.
"Ese día, hace como 5 años, llegó mi cliente que le gustaba jugar en el sorteo del martes, pero como no había "ceros" le dije que en el de viernes estaba el 53630 y se lo ofrecí, el como siempre compró toda la serie y cuál fue nuestra sorpresa que cayó en el premio mayor, cuando pasó le dije y nos regaló a mí y a mi compadre un cachito a cada uno, los otros 18 le dio tres a cada uno de sus hijos" expone.
"Durante la pandemia, nos quitaron de trabajar a partir del 12 de abril, porque se suspendió por primera vez en la historia la Lotería Nacional y volvió hasta el 12 de julio, justamente el 14 de julio cayó el premio mayor en los números que yo vendo, pero como estábamos en fase de contingencia no trabajamos hasta el 26 de julio y ese número el 41009, se quedó allá en México, sino otra vez lo hubiera vendido, pues de ese billete un cliente se lleva 10 pedazos", añade.
Esperamos que esto vaya mejorando, la pandemia no puede durar tanto, afirma, "y que se saquen muchos premios, porque esa es la ilusión de la gente y solo jugando se puede ganar, que compren porque como decía mi madre: todo número una esperanza y cada premio una realidad.