No hay pretexto para no salir adelante y Andrés Torres lo sabe bien, ya que ha emprendido un negocio de ventas ambulantes en el que te ofrece desde dulces hasta recargas de celular y el pago, además de en efectivo, se puede hacer con tarjeta bancaria.
Debido al recorte de personal en la empresa en la que laboraba se vio en la necesidad de buscar alternativas para subsistir, y fue así como decidió este emprendimiento.
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Lo despidieron, pero el encontró una forma de emprender en Tampico
Las complicaciones económicas derivadas de la pandemia y la inflación que persiste, han provocado un cambio acelerado en los modelos de negocios y la forma en que la gente enfrenta los retos de obtener ingresos.
Actividades comunes como la venta en la calle, en lugares establecidos o simples transacciones entre particulares se facilitan ahora con el uso de la tecnología.
Andrés Torres es un ejemplo de eso, vendedor ambulante desde hace dos meses, se dio cuenta que no bastaba ofrecerle a sus clientes una amplia gama de productos de consumo ocasional, sino que también debía darles alternativas de pago.
Coloquialmente se le dice "no dejar ir un solo cliente" y para eso decidió dar el siguiente paso en su pequeño negocio informal.
Andrés vende frituras, dulces y otros productos que cualquiera puede encontrar en una tienda, pero que él lleva a la mesa de quien quiera y también te ofrece la facilidad de realizar recargas telefónicas a cualquiera de las líneas existentes.
Del desempleo al comercio informal
En su anterior trabajo en la empresa Tubacero, ubicada en la colonia El Moralillo se registró un recorte de personal y desafortunadamente desde hace dos meses se encuentra sin empleo, pero eso no lo rindió ya que actualmente su ingenio lo ha llevado a buscar nuevas estrategias para subsistir.
"Sé que muchos no cuentan con efectivo para pagar, por eso fue mi iniciativa de tener la terminal, y no solamente me compren dulces también, puedo realizar recargas telefónicas a cualquier línea desde mi aplicación", dice.
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Todo es cuestión de buscar opciones, afirma Andrés
Andrés supo que debía adaptarse a la nueva realidad cuando al iniciarse como vendedor ambulante se percató que no todas las personas portaban efectivo para pagarle y ante la conveniencia de utilizar la tecnología para resolver este problema, decidió probar suerte con una alternativa que está al alcance de muchos.
Él ya había escuchado y visto como en muchos de los negocios a dónde iba tratando de vender sus productos contaban con terminales bancarias y aunque él es comerciante informal se enteró que podía comprar un pequeño artefacto que junto con su teléfono celular, fungen como terminal bancaria y de esta manera poder procesar los pagos facilitando así la compra a sus clientes.
"Todos se pueden adaptar"
Actualmente, el comerciante acude a cada lugar que tiene planeado visitar para ofrecer los dulces, recargas telefónicas y otros artículos de consumo habitual, llevando su terminal inalámbrica y salvando así el obstáculo de que la gente no lleve efectivo para comprar.
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Comenta que al principio tardó en familiarizarse con el funcionamiento del artefacto, pero rápidamente lo logró siendo ahora una de las herramientas más importantes en su actividad diaria.
Andrés ha podido comprobar que si una persona realmente quiere salir adelante con cualquier trabajo o actividad comercial puede lograrlo si encuentra las opciones adecuadas y se adapta con rapidez dejando de lado las excusas que de nada sirven.
