A pesar de que Caminos y Puentes Federales registra ingresos cuantiosos del cobro de peajes del puente Tampico y libramiento, cada vez devuelve menos recursos en obras de mantenimiento de las superestructuras, que registran un aforo de más de 7 mil vehículos por día.
Suscríbete a la edición digital de El Sol de Tampico aquí
En este año, "la Federación redujo considerablemente el presupuesto para Tamaulipas, lo que ha afectado a obras de mantenimiento de carreteras y puentes federales, incrementando el riesgo para los usuarios por el deterioro que acumula la red de conectividad", criticó Alfonso Celestino Uresti, vicepresidente de la Asociación Regional de Comerciantes e Industriales Mexicanos.
El problema de obras federales se acentúa porque el gobierno no solo redujo las asignaciones para entidades como Tamaulipas, sino que mantienen subejercicios, atrasando proyectos de mantenimiento y modernización, que se desconoce si en este año serán ejercidos en accesos tan importantes para la zona sur como el Puente Tampico y libramiento que lleva el mismo nombre.
Dijo que esos accesos, en el 2020, tampoco recibieron tareas de conservación, atribuible a la crisis por la pandemia y en el año en curso tampoco hay tareas correctivas, a pesar de que ambas infraestructuras presentan deterioros, como baches y hundimientos en la carpeta asfáltica.
Puente Tampico fue inaugurado hace 33 años, tiene un aforo vehicular de más de 3 mil vehículos por día y acumula varios años sin trabajos de mejoramiento, a pesar de la constante demanda de los vecinos de los municipios contiguos como Pueblo Viejo y Tampico Alto, quienes diariamente transitan hacia Tamaulipas para actividades de compras y trabajo.
"Las cosas no son diferentes en el libramiento poniente, obra que necesita constantes obras de reparación, al presentar condiciones de hundimientos en los puentes levantados sobre el sistema lagunario Chairel", opinó.
Incluso, mencionó que Caminos y Puentes Federales tiene pendientes obras de protección hacia la laguna, ya que son cientos de vehículos con cargamentos peligrosos que transitan sobre el camino de 14 kilómetros y que pueden derramar hacia el campo de agua que abastece hogares y empresas de Tampico, Madero y Altamira.
"La exigencia es que la SCT y Capufe regresen a esas infraestructuras parte de los recursos que cobran por su uso, en obras de conservación y modernización y los hagan vialidades seguras para sus miles de usuarios", demandó.
Otros puentes locales como Tamesí, Moralillo y Pánuco, fueron rehabilitados y apuntalados por una empresa particular y obligadamente por el tránsito hacia Tamazunchale de superestructura de peso de entre 400 y 500 toneladas.