Fue hace más de cincuenta años cuando el destino unió por casualidad al Sr. Lorenzo Ramírez Romero con su ahora esposa, la Sra. Martha Guadalupe Zavala Garza. Ellos se conocieron en la fiesta de una amiga sin imaginarse que sería el comienzo de su gran historia de amor
“La primera vez que nos vimos fue en una quinceañera, era el festejo de nuestra amiga Lucina”, describió en entrevista para El Sol de Tampico el coprotagonista de este romance.
Recordó que la alegre cumpleañera los animó a bailar juntos, “y pues, ¿quién iba a resistirse?, le pedimos permiso a su mamá y compartimos una o dos piezas juntos. Sin embargo, fue algo muy rápido porque ella se despidió y no volvimos a hablar”.
Tras ese suceso pasaron dos años para que sus caminos volvieran a cruzarse y esta vez para siempre. “Fue en el Club Social de la colonia Petrolera cuando la volví a ver, mis amigos estaban decidiendo a quien sacarían a bailar y aunque a mí no me tocaba con ella yo no me esperé y fui a invitarla”, recordó entre risas el Sr. Ramírez.
A LA VIEJA USANZA
Tras el feliz reencuentro se vieron nuevamente un domingo en la plaza, cuando se acostumbraba que tanto hombres como mujeres caminaran alrededor del parque en sentido contrario en busca de su media naranja; “hasta vendían gardenias y uno le regalaba una flor a la muchacha que le gustaba. Ahí nos citamos y luego nos volvimos a ver unas veces más hasta que nos hicimos novios”, dijo remarcando que esos recuerdos los atesora en su corazón. Cuatro hijas y ocho nietos después, ambos permanecen juntos y enamorados. Fue en mayo de 1970, cuando ambos contrajeron nupcias y compartieron los momentos más especiales del gran evento en las páginas de El Sol de Tampico, publicándose el matrimonio un 17 de Mayo narrado por la cronista de Sociales, Esther Vargas.
“Tenemos cuatro hijas Martha Maritza, Griselda Guadalupe y dos gemelas Lorena de la Luz y Consuelo del Carmen, todas nacieron aquí en Tampico al igual que nosotros. También tenemos ocho nietos y estamos muy contento. Ha sido una vida memorable y para mí ella es la primera y única mujer de mi vida”, detalló el Sr. Ramírez.