Las afectaciones en la glándula de la tiroides pueden provocar desde cambios en el humor hasta cáncer, pero poco se habla de los problemas de infertilidad que genera entre mujeres jóvenes que buscan convertirse en madres, aun cuando no es una enfermedad exclusiva del sexo femenino.
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En voz del endocrinólogo, Rafael Violante Ortiz, la tiroides es la glándula más importante para la fertilidad porque permite la regulación del período menstrual en la mujer, por lo que si esta falla, existe un alto riesgo de no poder tener hijos.
La tiroides es una glándula en forma de mariposa que se ubica en el cuello, arriba de la clavícula, es del tipo endocrinas, por lo que produce hormonas, así indica la Organización Mundial de la Salud.
Los problemas por un mal funcionamiento de esta son: Bocio, que es cuando se agranda la tiroides, crece; hipertiroidismo, cuando se producen más hormonas de las que se necesitan por lo que la función es rápida; hipotiroidismo, que es lo inverso, cuando se producen insuficientes hormonas y la función es lenta; cáncer de tiroides; nódulos que son los bultos que llegan a aparecer en la tiroides o en el cuello y aumenta el riesgo de cáncer; tiroiditis, que se refiere a la hinchazón de la tiroides.
La OMS establece que 750 millones de personas en el mundo han desarrollado alguna de las enfermedades señaladas, sin embargo estima que 60% de la población que tiene tiroides lo desconoce, de acuerdo a estudios publicados por la Universidad Nacional Autónoma de México, en México se estima la incidencia en 3 de cada 3 mil mujeres mayores de 50 años de edad.
Sin embargo, mujeres por arriba de la media de riesgo -40 a 50 años de edad- desconocen tener la enfermedad, por lo que sus intentos continuos de embarazarse fallan, al provocar la tiroides infertilidad. “Sobre todo el tipo hipotiroidismo, es un alto riesgo de infertilidad, es lo que más preocupa y el daño más grande que puede hacer a una mujer más joven, que se ve en mujeres de entre 30 años, ahorita el problema radica en que mujeres preparadas no se embarazan tan jóvenes, buscan tener hijos arriba de los 30 a 32 años, y en ese momento es cuando más les puede afectar”, refirió el especialista.
Amplió que “toda mujer mayor de 30 años que no logra embarazarse con facilidad debe de checarse la tiroides, porque podría tener hipotiroidismo subclínico, que es que la enfermedad está escondida, es una gran verdad y es lo más grave de la tiroides, además del cáncer, que puede provocar que las mujeres pueden tener el problema sin saberlo y por eso no logran embarazarse”.
Violante Ortiz indicó que la estimación de infertilidad a causa de la tiroides es de 25 a 30%, siendo altamente frecuente en la zona de la huasteca, además de ser un problema heredable de madre a hijos, por lo que si la mujer con tiroides llega a procrear, es necesario mantener un control de la enfermedad para disminuir riesgos en el bebé.
Solo entre 2 al 5% de mujeres con tiroides ya diagnosticada llegan a embarazarse, mientras que 16% de las embarazadas detectan en el transcurso de su gestación la problemática y un innumerable porcentaje lo desarrolla posterior al embarazo.
Explica el reconocido médico que el embarazo hace cambios hormonales que llevan a la mujer a necesitar mayor yodo, lo que produce hormonas tiroides y que estas trabajen de más, lo que lleva a muchas de ellas a producir la enfermedad, sin embargo, es una condición que avanza con los años, siendo ocho veces más frecuente en una mujer que en un hombre, en donde existe mayor riesgo de cáncer.
DE FAMILIA
Cuando la mamá, hermana, abuelita en una familia tienen tiroides, es altamente probable que las siguientes generaciones lo desarrollen, sin embargo cuando ya está detectado y se queda embarazada, el menor puede tener retraso mental, de no llevar el control fármaco.
“En niños es una causa frecuente de talla baja, de las más frecuentes para que el niño no crezca y de mal desarrollo escolar, cuando no están aprendiendo bien en la escuela, hay que hacerle el estudio, porque pueden tener tiroides, se detecta por medio del tamiz, es importantísimo que se le haga al nacer, porque si no se le detecta a tiempo, si no se hace un tratamiento rápido, genera retraso mental”, indicó.
En este tenor, el entrevistado recomienda a toda persona con familiar con tiroides, checarse al menos cada 5 años, para descartar irregularidades tiroideas.
Al constituir el yodo un elemento clave para la tiroides, el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) señala que el consumo produce hormonas y este se obtiene de una alimentación saludable, señalando que el cuerpo no produce yodo por sí solo, sino que se encuentra en alimentos, en el agua y en el suelo de manera natural.
La tiroides regula funciones del organismo como los latidos del corazón, la temperatura corporal, la movilidad del intestino, el crecimiento y el período menstrual, por lo que cuando se tiene mucho frío, cansancio extremo, piel más seca, pérdida de memoria, depresión, estreñimiento, falta de deseo sexual, aumento de peso o pérdida de peso, se tiene mucha o poca energía, es probable que esté fallando.
Julio Morfin, agente médico de los laboratorios IFA Celtics, indica que el hipotiroidismo no tiene cura, se padece durante toda la vida, sin embargo, se llega a controlar bajo vigilancia médica, logrando inclusive tener hijos, para lo que es fundamental sustituir la hormona tiroidea por medio de medicamentos que se deben de ingerir diariamente, control cada 6 meses y chequeos clínicos constantes que garantizan una mejor calidad de vida.