El miedo a contagiarse de Covid-19 obligó a una familia regiomontana a adecuar un microbús para viajar y pernoctar en la unidad, y así tener el menor contacto con el resto de las personas.
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Originarios de Monterrey, Nuevo León y de Saltillo Coahuila, el jefe de la familia, Santiago Flores Herrera, señaló que fue un viaje de unas siete horas desde el noreste del país hasta el sur de Tamaulipas.
“Venimos de Monterrey, así como de Saltillo, con mi esposa, hija, yerno, nietos y venimos a pasar un ratito feliz acá”, señaló.
Mencionó que debido a la contingencia sanitaria que se vive y ya cansados del confinamiento, desde hace algunos meses decidieron comprar un microbús que estaba convertido en chatarra, con la idea de repararla y modificarla para convertirla en una casa móvil y así acudir a alguno de los destinos turísticos, optando por el sur de la entidad.
“Preparamos el camión con camas, con cocina, con baño, con todo para podernos salir, la idea es quedarnos unos 4 o 5 días, estamos queriendo ponerle Gilligan”, expresó.
Señaló que en este proyecto de la reparación del camión invirtieron alrededor de 40 mil pesos, instalándole paneles solares, filtros para el agua y un baño, y ya en la temporada vacacional se enfilaron a esta parte de Tamaulipas, sin tener ningún contratiempo.
“Nos echamos siete horas de viaje, muy tranquilo el camión, muy tranquila la carretera, fijate que el Federal iba delante de nosotros, la Marina, bien seguros nos sentimos, teníamos miedo al principio, pero hay mucha seguridad”, citó.
Flores Herrera, mencionó que debido al temor de contagios ha tomado junto a su familia algunas medidas de prevención como lo es estar un poco alejado del resto de las personas, para evitar aglomeraciones como lo indica el sector salud.
Señaló que solo conocía el sur de Tamaulipas a través de las noticias, por eso decidieron venir a esta parte para pasar las vacaciones de Semana Santa.