PUEBLO VIEJO. - La suspensión de clases desde el pasado mes de marzo propinó un duro golpe a pequeños comerciantes ambulantes.
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Los afectados vieron disminuidas sus ventas hasta en un 80 %, además, en cinco meses no se han podido recuperar.
Así lo dio a conocer Nabor García del Ángel, quien recientemente cambió de empleo para dedicarse a la venta de la tradicional nieve de garrafa, ya que hasta hace unos días y durante un largo tiempo se dedicó a la venta de paletas de hielo.
Explicó que antes se dedicaba a la venta de paletas de hielo y el principal sitio para ello eran las puertas de las escuelas, logrando buenos ingresos.
