Atribuido a las altas temperaturas que aumentan la mortandad en las granjas, el precio del pollo subió 24 por ciento y desde ayer se vende en más de 60 pesos en mercados y tiendas de autoservicio, lo que se agrega a las alzas en la carne de cerdo, aguacate y otros básicos.
La comerciante del mercado "Francisco I. Madero", Julia Lopez, mencionó que desde el fin de semana el kilogramo de pollo fresco pasó de 40 a 60 pesos, con la posibilidad de que siga subiendo, pues así lo advierten algunas distribuidoras como Bachoco, el productor más grande del país.
"Hace tres años los costos al consumidor se fueron hasta los 75 pesos, pero después quedó normalizado y ahora de nuevo nos sorprendieron con este incremento, afectando por supuesto los bolsillos de las familias, pero también de los comerciantes cuya comercialización ya se vio afectada, sobre todo en una temporada de bajo consumo".
Estimó que en esta localidad se comercializan más de 10 toneladas por semana de pollo fresco y un volumen similar de piezas congeladas, que se distribuye a través de las tiendas de autoservicio y empacadoras.
El principal argumento de los productores son los nuevos costos e insumos para la engorda de las aves, así como los costos fijos como el transporte, además de que el calor subió la mortandad en las granjas y baja la producción.
Por su parte, la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes levantó una alerta por el alza de precios generalizada en el país, pues en las últimas semanas hay incrementos en hasta nueve productos de los 22 más demandados en el pequeño comercio, registrándose un aumento importante en el caso del aguacate, jitomate y huevo.
De acuerdo con la Unión Nacional Avícola (UNA), el consumo per cápita de carne de pollo para este año será de 26 kilos, uno más que en 2007.
El alimento es el de mayor consumo en México y representa aproximadamente 47.6 por ciento de la que se produce en el país, a cifras de 2005.
La UNA indica que el consumo registra un crecimiento dinámico porque es más accesible para el consumidor, a diferencia de la carne de res o de cerdo.
Además representa un producto más saludable y nutritivo para el consumidor, cada vez más preocupado por evitar la obesidad. La carne de pollo es también más fácil de cocinar por la amplia variedad de platillos que se pueden preparar.
Hasta mayo pasado, el kilo del producto se vendía en alrededor de 40 pesos, mientras que la pechuga se vendía sobre los 50 pesos, pero en algunos casos el costo de este último se ha duplicado.