Sonríe, es sano

Este viernes 4 de octubre se celebra a nivel mundial el Día Internacional de la Sonrisa, pretexto perfecto para dibujar una en nuestro rostro

Silvia Rangel

  · viernes 4 de octubre de 2019

Sonreír es considerada una de las terapias más baratas para mejorar la salud y el estado de ánimo, por lo que este viernes 4 de octubre se celebra a nivel mundial el Día Internacional de la Sonrisa, pretexto perfecto para dibujar una en nuestro rostro.

La festividad se desarrolla en honor a Harvey Ball, creador del símbolo iconográfico “Smile Face” o “Carita Feliz”, quien falleciera el año 2001 y tiene como meta que todo mundo sea feliz y esté alegre por lo menos hoy.

Desde el año 1999 se proclamó instituir este día, el primer viernes de octubre y la asociación “Harvey Ball World Smile Foundation”, que se fundó en su honor, realiza cada año una serie de actividades y recauda fondos para obras benéficas que lleven alegría a muchas personas, sobre todo de escasos recursos o que se encuentran enfermas.

De acuerdo a investigaciones cuando una persona sonríe el cuerpo libera endorfinas y serotoninas, que nos hacen más felices, sin estrés y mejore nuestro estado de ánimo.

En la actualidad la gente no ríe mucho debido a diversas situaciones como puede ser: La depresión, falta de empleo, escasez de dinero, problemas de salud, conflictos amorosos, emocionales y hasta porque el clima está “feo”.

La risa “es una expresión cuyo significado es universal, ya que refleja buen humor, placer o entretenimiento y científicamente es una reacción involuntaria, sin discriminación”, dijo a El Sol de Tampico la psicóloga y máster en Educación, Martha J.

Reyes Grijalva. La especialista tiene dos frases favoritas sobre este tema: "Una sonrisa es la luz del corazón” y “Las personas que más sonríen son las que se consideran más felices”. La felicidad “puede ser provocada por múltiples factores o situaciones, pero lo que la mayoría de las personas no sabe diferenciar es la felicidad del placer, entonces creen que son felices por placeres que son sólo momentáneos y en realidad la felicidad va más allá de un momento”.

Ejemplificó mencionando que mucha gente dice: “El chocolate me hace feliz”, y lo que este provoca es placer, no es felicidad, porque cuando se termina éste ¿se acaba la felicidad?. La felicidad se puede medir en el amor que se tiene a los hijos, a la familia, a Dios porque es infinito y no tiene caducidad.

LOS ADULTOS OLVIDAN REÍR

Siempre se ha dicho que los niños son los que más se ríen y esto se debe, de acuerdo a nuestra entrevistada, a que ellos son seres inocentes y tienen algo que los adultos hemos perdido que es la capacidad del asombro.

Todo les parece magnífico y por lo tanto disfrutan más, su risa es expresión de agrado, se divierten con todo y con todos, por eso es más fácil que ellos se la pasen riendo.

Así como los pequeños ríen hay personas que pocas veces sonríen “las causas pueden ser variadas, desde una baja autoestima, no les gusta su dentadura, su personalidad es seria, un estado de ansiedad que no les permite disfrutar el presente o la depresión que inhibe la risa. En cuántas ocasiones no hemos escuchado la frase: “Es que esa persona está amargada, por eso nunca sonríe”, a lo que la psicóloga aclaró que “la amargura crónica ya está siendo diagnosticada en los consultorios, son personas que siempre creen tener la razón, piensan que su pasado es mejor; le tienen miedo al éxito, creen que no tienen más opciones en sus vidas y se la pasan criticando todo, entonces por qué hay más personas así, es sencillo: Porque no son felices”.

La depresión es moda, es la enfermedad del siglo, “lo que mejor podemos hacer es canalizarlos a terapia psicológica, una persona deprimida está enferma y necesita herramientas para salir de ese estado, lo que mejor podemos hacer es comprender que necesitan a la familia y un ambiente armónico para superar su trastorno”.

Para ser feliz todos debemos de poner nuestro granito de arena, para crear un mundo mejor, en un ambiente de paz, respeto y alegría por vivir.

Reyes Grijalva se declara partidaria de lo que es la risoterapia, técnica utilizada para reanimar y producir sonrisas.

Está comprobado científicamente que la risa es curativa y muy terapéutica en casos de personas deprimidas, desahuciadas o en estados complejos “los hace disfrutar del presente y producir sustancias en el cuerpo que les genera un estado de bienestar”.

En lo personal agregó, la he practicado y llevo a mis alumnos de psicología a realizarla y nos vamos a los hospitales, principalmente en el área de oncología infantil y hemos obtenido excelentes resultados tanto de salud, agradecimientos y participación y es que “Ver a un niño o un adulto sonreír es el mejor pago para el corazón de los seres humanos”.