El retroceso de la industria de la construcción en esta entidad permanece imparable y entre enero y agosto acumuló un desempeño negativo del 16.2%, al disminuir el valor de su producción a 11 mil 819 millones de pesos y perder 4532 empleos formales.
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De acuerdo con la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción que preside Roberto Salinas Ferrer Tamaulipas se ubicó en el doceavo lugar por su desempeño productivo, pero sin registrar resultados positivos en esos siete meses del año.
Así los constructores, siguen sufriendo la falta de obra pública, la cual disminuyó 28.3%, mientras que la inversión privada alcanzó una recuperación del 3.9%,
En ese periodo, la caída más grave ocurrió en obras para la exploración y producción petrolera, instalaciones petroquímicas, además de conducción de gasolina, cuya facturación bajó 60.9%, igual comportamiento tuvieron la disminución de obras para la edificación de vivienda, industrial, comercial y de servicios con 18.5% menos. En lo que se refiere a transporte y obras carreteras bajaron 6.8%.
A nivel nacional el valor de la producción de las empresas constructoras registró una caída de 24.6%, la de Tamaulipas fue del 16.2% y solo estados como Colima, Nuevo León y Oaxaca obtuvieron cifras positivas, con 10.5%, 3.9 y 1.2% respectivamente en base a cifras del Centro de Estudios Económicos del Sector de la Construcción con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía.
IGNORAN A CONSTRUCTORAS DE LA REGIÓN
Sin embargo, manifestó esperanza que en este último trimestre del año, el gobierno federal ejerza el presupuesto asignado para infraestructura publica, el cual en julio pasado apenas alcanzaba el 7% del total.
Roberto Salinas agregó que la situación que viven las empresas de la construcción es muy dura y lo que es peor, gobierno del estado y oficinas federales no privilegian la contratación de compañías pequeñas y medianas de la región y el Observatorio de CMIC detecta que más del 80% de las licitaciones de obra publica se entregan a constructores de otros estados.
Esto tiene un efecto cadena muy negativa para la economía regional y esos recursos dejan de gastarse en los comercios y los servicios, además de presionar la pérdida de empleos.
De esa forma, mencionó que la contratación de personal, entre agosto de 2019 a ese mismo mes de este año disminuyó 4.8% al dar de baja del Instituto Mexicano del Seguro Social 4531 trabajadores y quedar con una 43,846 empleados.
