Lo que para muchos era un anhelo tener precipitaciones pluviales abundantes para terminar con la crisis hídrica y reactivar los campos agrícolas en la zona sur de Tamaulipas y norte de Veracruz, para los productores de sal la falta de lluvias fue una oportunidad para continuar sembrando y cosechando este condimento que es empleado para uso industrial y alimentos.
Nos referimos a los productores de sal del municipio de Altamira, específicamente de las localidades de Aquiles Serdán o El Barranco o Congregación Lomas del Real, ambas ubicadas al norte de los terrenos de la Administración del Sistema Portuario Nacional (Asipona) y a un costado de la carretera interestatal que conduce hacia Aldama.
Con la llegada de las lluvias, que ocurrió a finales del pasado mes de junio para arreciar de una forma abundante en julio, inició la crisis económica para los productores y personas que son contratadas para apoyar en las labores de jornal debido a que bajó la actividad laboral y los campos de cosecha se destruyeron por la corriente pluvial.
Sociedad Cooperativa Salineros del Golfo
Nos dimos a la tarea de entrevistar a un integrante de la Sociedad Cooperativa "Salineros del Golfo", que se localiza en el ejido Aquiles Serdán, la cual está conformada por 27 socios, quienes durante la primera mitad del presente año se enfocaron a producir sal en los campos de cosecha que se ubican cerca de las aguas del Golfo de México, en la zona norte de Playa Tesoro.
“En la preparación de las parcelas de agua y cosecha de sal nos fue bien en esta primera mitad del presente año, pues nos permitió obtener una buena producción a pesar de todos los inconvenientes que enfrentamos debido a la falta de equipo e infraestructura para almacenar nuestro producto que ya una vez que llegaron las lluvias pues se detuvo todo”, informó Mariano Hernández, socio de la agrupación cooperativista en mención.
El total de producción de sal que lograron levantar los 27 productores y residentes en el ejido Aquiles Serdán o El Barranco, fueron 10 mil toneladas aproximadamente, mismas que fueron colocadas en los terrenos de la Sociedad Cooperativa “Salineros del Golfo”, que se localiza en la parte frontal de las oficinas generales, lamentablemente el producto quedó al aire libre.
“Mientras no llovió alcanzamos a cosechar toda la sal que pudimos y que nuestros recursos económicos nos permitió para pagar jornales y transportarla hasta los patios aquí de la cooperativa, una vez que se presentaron estos aguaceros pues ya se nos vino abajo el ánimo debido a que merma esa sal cosechada”, agregó Mariano Hernández.
Inconvenientes de los productores de sal
Aparte de los bajos precios que se cotizan en el mercado nacional la tonelada de sal, los integrantes de la Sociedad Cooperativa “Salineros del Golfo” se enfrentan a la carencia de maquinaria y camiones para transportar el producto de los campos salineros a su área de almacenamiento.
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Pero además no cuentan con bodegas techadas que eviten que en temporada de lluvias se les moje el producto cosechado, pues eso les genera una merma hasta de un 15 por ciento de lo recolectado.
“Nosotros como Sociedad Cooperativa, la maquinaria que tenemos está muy deteriorada, no contamos con camiones en buenas condiciones y mucho menos liquidez económica que nos permita pagarle a nuestro compañero socio el pago de los jornaleros y así aumentar su producción”, agregó Mariano Hernández.
El entrevistado además destacó que lamentablemente no son sujetos de un crédito bancario por parte de la banca comercial, en este caso Santander, donde maneja su cuenta pues no pueden entregar en garantía crediticia un bien inmueble para un préstamo económico, las propiedades que tienen se encuentran asentadas en el ejido Aquiles Serdán y sólo tienen título de posesión más no escritura.
“En el año dos mil once fuimos objeto de un crédito económico por parte de una financiera del Gobierno Federal, pero a partir de ahí se nos cerraron las puertas pues lamentablemente lo que nos piden en garantía de pago no lo podemos acreditar al estar en un ejido, entonces sí somos buenos pagadores pero no nos autorizan un crédito”, destacó el entrevistado.
A la fecha la Sociedad Cooperativa “Salineros del Golfo” requiere de cuando menos 500 mil pesos para poder renovar su maquinaria como son traxcavos, maquinas retroexcavadoras, camiones de volteo, motobombas, liquidez a sus socios que les permita aumentar la producción.
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Los socios aún recuerdan que en el año 2011 al tener liquidez la cooperativa logró una cosecha récord de 15 mil toneladas, pues eso provocó que el productor se le financiara el pago de jornaleros.
¿Quiénes más pierden?
Pero ante una baja producción de sal y falta de infraestructura para su almacenamiento cada año, los que pierden son los habitantes del ejido Aquiles Serdán pues alrededor de un centenar de personas son contratados para apoyar en la preparación de la tierra, extracción del condimento, empaque y carga.
“En Aquiles Serdán por muchos años la gente vive de la producción de sal, ahorita no hay trabajo para la población en general, por las lluvias que se presentan en esta segunda mitad del año, se reactivará hasta enero y empezaríamos a levantar una nueva cosecha allá por el mes de marzo del 2025”, agregó el entrevistado.
Aquiles Serdán se localiza a menos de 20 kilómetros de la cabecera municipal de Altamira, su actividad primordial es la producción de sal, pero también dependen de la pesca, agricultura y ganadería, al faltar trabajo en esas áreas los jefes de familia y amas de casa se van a la ciudad a buscar una fuente de ingresos económicos, mayormente si tienen hijos estudiando en nivel medio superior y superior.
Expectativas de los salineros del Golfo
Los que conforman la agrupación fundada en el año de 1948 están esperanzados que alguna institución de Gobierno federal, estatal o municipal volteé a verlos y los apoye con un programa crediticio para la compra de maquinaria, construcción de grandes almacenes, un plan de trabajo para aumentar la producción, comercialización y hasta colocar una planta de secado en el parque de la pequeña y mediana industria dentro de la Asipona.
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“Nosotros también somos una industria de muchos años, necesitamos que las autoridades correspondientes nos volteen a ver y nos otorguen apoyos, pues la sal que se extrae de las parcelas de agua tiene una gran demanda en la República Mexicana como es Aguascalientes, Puebla, Nuevo León, Coahuila, San Luis Potosí, Hidalgo, Estado de México, entre otras entidades, pues nuestra gente sabe trabajar y producir la riqueza del campo, en este caso la sal que es de gran calidad”, puntualizó Mariano Hernández.