Con el pago de una fianza de 200 mil pesos y cumplir con un arraigo domiciliario, abandonó la prisión del Centro de Ejecución de Sanciones (Cedes) de esta ciudad y puerto de Altamira, Eduardo “N”, acusado de haber asesinado en el mes de octubre del año 2016 a su rival de amores, Marco Ambrosio “N”, en un domicilio ubicado en la colonia Ampliación de la Unidad Nacional, en Ciudad Madero.
La puesta en libertad de Eduardo “N” del Cedes de Altamira fue hecha la tarde del pasado jueves y ordenada por el juez de control, José Arturo Córdova Godínez, quien atendió la audiencia de la parte defensora del acusado para modificar las medidas cautelares del responsable del crimen del trabajador petrolero Marco Ambrosio “N”, quien murió al ser atacado con un cuchillo de cocina y quedar en el interior de la casa del autor material del crimen.
La inconformidad de los familiares de la víctima por la puesta en libertad de Eduardo “N” fue manifiesta, cuando aún falta que se lleve a cabo un juicio oral, el cual se deberá efectuar después de que se resuelva el amparo en revisión 173/2017 radicado en el Primer Tribunal Colegiado Penal y del Trabajo.
De esta manera los familiares del finado afirmaron que “el juez de control determinó la excarcelación del señalado, pero el caso sigue su curso toda vez que en próximas fechas se efectuará un nuevo juicio oral cuando se resuelva el amparo en revisión radicado en el Primer Tribunal Colegiado Penal y del Trabajo, el cual está por definirse”.
EL DÍA DE LOS HECHOS
Fue la medianoche del 20 de octubre de 2016 cuando Marco Ambrosio, en aparente estado de ebriedad, arribó violentamente al domicilio marcado con el número 305 de la Avenida Monterrey en la colonia Unidad Nacional de Ciudad Madero a la casa de la familia donde vivía Eduardo “N” junto con su esposa, quien fue la manzana de la discordia.
A bordo de su camioneta Marco Ambrosio penetró al bien inmueble derribando el portón del garaje para posteriormente ingresar a la casa y agredir a Eduardo “N”, en aquel entonces con 28 años de edad, que se encontraba junto a su esposa.
Aparentemente la mujer de Eduardo “N” mantenía una relación sentimental con Marco Ambrosio, siendo el motivo principal que desencadenó este crimen pasional.