Por años Tampico y Ciudad Madero -sur de Tamaulipas- se han disputado ser tierra de Roberto Cantoral, el tamaulipeco de gran talento creador de temas tan emblemáticos como “Me odio”, “El Triste”, “Al Final”, “Noche no te vayas”, “La barca”, “Quiero huir de mí”, “El preso número nueve” y el tema por todos cantado “El Reloj”.

A finales del año 2013 el Instituto Tamaulipeco para la Cultura y las Artes (ITCA) publicó el libro “50 años del Registro Civil en Tampico” en el que incluye el acta de nacimiento del reconocido Roberto Cantoral, finalizando de esta manera con la interminable disputa de la cuna del multipremiado compositor y letrista.

En el documento oficial se cita al padre, Antonio Cantoral Zambueza, como quien presenta y brinda el nombre de Rafael Roberto Cantoral García al menor, nacido en Tampico, Tamaulipas, el 7 de junio de 1935, los tíos lucen como testigos del hecho, que quedó sellado en letra cursiva, según mencionó el cronista porteño Marco Antonio Flores, quien descubrió este documento.

Pero, ¿por qué si el documento oficial existe se sigue diciendo que el artista es maderense? Es simple explicar. Roberto Cantoral vivió su infancia en la popular colonia Cascajal, aunque se desconoce la ubicación exacta, se cree que fue a unas cuadras del entonces Colegio Alborada -sito en calle 20 de Noviembre, entre Díaz Mirón y Carranza-, donde cursó sus primeros estudios; posteriormente cambió su residencia a la colonia Guadalupe Victoria y finalmente a Ciudad Madero, añadió Flores.

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En la urbe petrolera se cree habitó en la colonia La Barra y cerca del campo deportivo Siete y Medio donde dejó un semillero de amistades como la de Carlos Soriano, motivo que generó la creencia que su origen es maderense aunque no exista registro en lo civil ni religioso que lo avale, precisó la historiadora Carolina Infante Pacheco.

Una vez en esta tierra vecina, “se piensa continuó con sus estudios en lo que ahora es la escuela ‘Aurelia García Rodríguez’, antes conocida como la Artículo 123” y ubicada frente a la Refinería Madero, recuerda Juan José Villela, promotor cultural.

Antes de partir a la Ciudad de México, de donde no regresó a este puerto, vivió en la colonia Obrera en Tampico, cerca del entonces parque de beisbol.

Su origen nunca ha sido especificado por sus hijos, la actriz Itatí Cantoral, quien “recibió atenciones a la muerte del compositor para la realización de un homenaje en tierra maderense a lo que se negó”, comentó Infante Pacheco; o José y Roberto, este último el año pasado estuvo en Tampico en un concierto privado que se ofreció con temas exclusivos del ya legendario artista.

Pero como entre las décadas de los 20 y 30, los maderenses acostumbraban registrar a sus hijos en Tampico, ya que la Oficialía del Registro Civil “quedó establecida en Ciudad Madero hasta el año 1926”, subrayó la cronista maderense, la duda entre quienes llegaron a conocerlo, a ser sus vecinos y a admirarlo, perdurará como mito urbano. ¿Es tampiqueño o maderense?

"EL RELOJ"

Aunque poco se sabe de sus pasos en esta su ciudad, son muchas las historias que se han generado en torno a su figura, como que mirando el monumental reloj de la Iglesia Catedral de Tampico surgió el romántico tema de “El Reloj”.

O que este mismo tema lo escribió en una capilla del hoy viejo Hospital Civil donde arrodillado pedía por la salud de su amada.

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La conocida composición narra cómo está a punto de perder a su esposa, de quien también se ha dicho vivió sus últimos días en el antiguo hospital de este puerto, pero si bien es cierto la dedicó a ella, no fue en el nosocomio jaibo donde la escribió, “sino en una clínica del Distrito Federal donde Cantoral, mirando la televisión, visualizó un reloj con segundero que le inspiró la narrativa musical”, comparte Carlos Soriano.

LUCHADOR POR LOS DERECHOS DE AUTOR

A él se le atribuye la creación de la Ley del Derecho de Autor, aunque hay que aclarar que fue “parte de un grupo de compositores del entonces gremio”, hoy Sociedad de Autores y Compositores, quienes hicieron dicha labor.

El creador de “El Triste” se distinguió por ser un “luchador, por lo que tras su muerte, su hijo, Roberto Cantoral, continuó con la labor para las modificaciones de la ley logrando, de la mano de Armando Manzanero, la suspensión y embargo de taquillas y aparatos por el uso ilegal de la música”, dijo en entrevista Luis Enrique Montes, delegado en Tamaulipas de la Sociedad de Autores y Compositores.

SIN “APLAUSOS” EN LA ZONA

Por la protección a sus derechos es que la imagen del artista está presente en cada momento en la mente de los autores, sobre todo en la de los tampiqueños y maderenses.

Pero más allá de la disputa de su lugar natal y de sus innumerables composiciones, no existe ningún reconocimiento público en esta zona a la memoria, pero sobre todo al legado musical que ha dejado Cantoral al mundo.

“Esperamos que se sumen para generar un recuerdo tangible a la grandeza de este gran tamaulipeco”, refirió Montes a El Sol de Tampico.

Incluso se desconoce el sitio exacto donde vivió Cantoral, por lo que se ha convocado a la comunidad para ubicar con exactitud su antigua vivienda, en donde se desea colocar una placa.

A las propuestas de honrarlo se suma la de Marco Flores, cronista porteño, quien busca impulsar la iniciativa de imponer el nombre de “Roberto Cantoral” a un tramo de la carretera de bienvenida a esta ciudad ingresando por El Moralillo.

Sin duda Roberto Cantoral es eterno en su música, en temas usados durante décadas en serenatas y románticos boleros, mas darle un sitio tangible para su recuerdo, sin importar si es Madero o Tampico, sería hacerle justicia al hombre que en sus letras se negaba a ir a la guerra y pedía a la noche no se fuera.

ADMIRABLE CAMINO

• 1935: El 7 de junio nace en el sur de Tamaulipas. Documentos oficiales dicen que en Tampico. Mas versiones populares aseguran que en Ciudad Madero. Sus padres: Antonio Cantoral Zambueza y Herlinda García Planes
• 1950: Inicia en la música con el dueto “Los Hermanos Cantoral”, reconocido por las piezas “El crucifijo de piedra” y “El preso número nueve”
• 1954: Funda el trío “Los Tres Caballeros”, a lado de Leonel Gálvez y Benjamín Correa
• 1958: Recibe la Medalla al Mérito por el presidente de México, Adolfo López Mateos
• 1971: Gana el Festival OTI con su pieza “Yo no voy a la Guerra” en voz de Alberto Ángel “El Cuervo”
• 1973: En voz de Enrique Cáceres gana una vez más el Festival OTI con su composición de “Quijote”
• 1975: Da a conocer sus composiciones “El Reloj” y “La Barca” con récord de venta mundial
• 1982: Asumió la presidencia de la Sociedad de Autores y Compositores de México
• 2009: Recibe el Premio Grammy por la Academia Latina de la Grabación
• 2010: El 7 de agosto fallece víctima de un infarto en Toluca, a la edad de 75 años
• 2012: El 7 de junio fue inaugurado el centro cultural con su nombre en la Ciudad de México, honrando su legado musical

Recordamos a Roberto Cantoral, talento mexicano nacido en el sur de Tamaulipas nacido un 7 de junio de 1935.