Tampico tenía apenas un año de haber sido repoblado cuando el presidente Guadalupe Victoria inició la celebración del Grito de Independencia en 1824, esta conmemoración fue llegando poco a poco a todas las regiones del país y a la zona en los últimos años de siglo antepasado.
Son tres inmuebles los que ha tenido el Gobierno de Tampico para la sede de los poderes del municipio.
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En el primero que data de 1927 no se tenía aún un balcón porque la celebración de la independencia se realizaba todavía en conjunto con las autoridades religiosas, se efectuaba una misa y el discurso oficial de daba en los pórticos.
En el segundo inmueble, que se terminó de construir en 1925, se tuvo un balcón, pero no sé contempló una campana, porque aún no se estilaba de este modo.
Es en el gobierno de Benito Juárez a partir de 1860 cuando se le da a este fecha el carácter de festiva y se toma en cuenta en un calendario cívico que se realiza en estos años.
Será un personaje que tiene mucho que ver con Tampico, Porfirio Díaz Mori, el que dará otro carácter a esta celebración, pues se inicia con las paradas militares y una fiesta, aunque al estilo europeo, donde se participa ya con un discurso mas oficial y el tañer de una campana a la usanza de Miguel Hidalgo.
El presidente Díaz Ordaz dona la campana al Ayuntamiento
Tocará ya en el actual inmueble del ayuntamiento, que cuenta con un balcón principal y es colocada ahí después una campana, para la ceremonia oficial, pero a pesar que se iba a inaugurar en septiembre, el edificio solo sirvió para resguardo de la población al golpear en 1933 un ciclón que inundó parte de la ciudad.
Fue a partir de 1965 cuando en el balcón principal de este monumental edificio se instaló la actual réplica de la "Campana de Dolores", que luce el palacio municipal de Tampico que llevaba ya 32 años de haber sido inaugurado y se trasladó desde la ciudad de México hasta ahí la campana.
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A gestión del señor Rodolfo Q. Peralta fue donada por el entonces presidente de la república, Gustavo Díaz Ordaz, siendo alcalde de Tampico Vicente Inguanzo Suárez, según refiere la placa en bronce situada en el mismo balcón central del ayuntamiento porteño.
La actual campana de la independencia fue tañida por primera vez hace 58 años, por Vicente Iguanzo, que en dos ocasiones le tocó ser presidente de Tampico, cuando ya la celebración del grito se realizaba con los protocolos que ahora ya se han instaurado por el gobierno federal.
Fue removida de su lugar en una ocasión
Entre los datos curiosos de esta celebración está la de septiembre del año 2013, cuando por una amenaza de huracán la exalcaldesa Magdalena Peraza Guerra tuvo que suspender la ceremonia y festejo, sin que el ciclón golpeara la zona, fue una semana más tarde cuando se efectuó el protocolo.
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Otra anécdota se dio durante la gestión del expresidente Arturo Elizondo Naranjo, quien mando a trasladar todo el campanario del palacio municipal al edificio del correo, que cumplía 100 años de haber sido construido, dando desde el balcón del centenario inmueble los vítores a los héroes y el toque de la campana, respondiendo los ciudadanos desde la Plaza de la Libertad.
La más reciente es sin duda la que protagonizó el presidente Jesús Nader a quien le tocó dar el Grito de Independencia ante una Plaza de Armas vacía, pues la pandemia del Covid-19 obligó a las autoridades a no convocar al pueblo por el temor de elevar los contagios, sonando la campana en medio de esta situación de contingencia sanitaria.
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La ceremonia que enaltece a los mexicanos cada mes de septiembre, ya desde el año pasado se volvió a realizar con los protocolos normales que se tienen para esta ceremonia y será la 58 ocasión que la réplica de la campana de Dolores suene a la par de los vítores y la alegría de los tampiqueños.
