Con toneladas de basura y cascajo es rellenado un amplio predio de la laguna del Carpintero, empeorando la depredación histórica que sufre ese pulmón de la ciudad, ante la omisión y desinterés de las instituciones oficiales de protección ambiental.
Sin la intervención de la Profepa, trabajadores del gobierno municipal y particulares han depositado en los últimas semanas grandes cantidades de desechos de materiales para construcción en áreas verdes, que deben ser reforestadas y no convertidas en basureros, criticó Sergio García Sandoval, presidente del Consejo Ciudadano del Agua del Estuario del Río Pánuco.
Son más de cuatro hectáreas de terreno pegados al centro de convenciones y el espacio cultural metropolitano, donde ha sido depositado el cascajo ofreciendo un pésimo aspecto, lo que exige la actualización de la Procuraduría Federal de Protección Ambiental para que castigue a quienes lo hayan hecho, agregó.
Otros particulares, que mantienen la propiedad de terrenos junto al bulevar López Mateos, también mantienen basureros enormes de desechos de materiales para la construcción, para rellenar las áreas, lo que está prohibido, pero no hay autoridad que lo detenga.
Hay mucho enojo, indicó, de las organizaciones ambientalistas por el claro desinterés del gobierno del estado y el municipio de proteger y cuidar el medio ambiente, rubro que desdeñan porque no tienen compromiso con la sociedad.
"No limpian, no reforestan, ni llevan a cabo tareas para dar uso recreativo y ecológico a los predios de la laguna del cCarpintero, ya depredada por la gran cantidad de aguas negras que reciben del drenaje proveniente de viviendas y empresas de la periferia".