Pueblo Viejo, Ver., Diciembre 28.- El reparador de calzado o zapatero remendón es un oficio que se niega a desaparecer, prueba de ello es el taller ubicado en "Pablo A. Gutiérrez" en la zona centro del municipio de Pueblo Viejo, en la zona norte de Veracruz, donde numerosos zapatos, herramientas, retazos de cuero y clavos abundan sobre una mesa de trabajo.
Ahí en ese modesto taller está Santiago Pacheco Pacheco, el zapatero remendón o zapatero de viejo, como en algún tiempo se les conoció a quienes reparan el calzado, a los que ahora llaman solo zapateros.
➡️ También te puede interesar: Beatriz Almazán y el reto de ser costurera en pleno siglo XXI
Sentado en un banquillo, con un trozo de cuero sobre sus muslos, revisa minuciosamente el proceso de reparación de un zapato de mujer que le han llevado, del cual dice, "con una buena reparación que le hagamos le van a durar algunos años más".
Con 20 años en el oficio, todos en el mismo lugar, recuerda cuando comenzó como ayudante, siempre observando, atraído por esa magia de ver el proceso de renovación de un viejo y roto zapato, que para muchos en la actualidad no quedaba más destino que la basura.
Ese proceso que culminaba con un par de zapatos a los que se les devolvía la vida y el lustre que alguna vez tuvieron de nuevos, trabajo que para el dueño de ese par, es darle más vida a su caminar.
Desde la calle se escucha una voz fuerte que menciona el nombre de Santiago, un viandante que a su paso por la calle "Pablo A. Gutiérrez" saluda al zapatero, el cual responde el saludo para enseguida seguir trabajando.
Parece que reparar un zapato es cosa del pasado
El taller del zapatero es ese lugar donde el olor a cuero nuevo y cuero viejo aún se puede percibir, mismo que se combina con el olor de la cola que utiliza para pegar el calzado, donde siguen llegando personas que llevan sus zapatos preferidos para repararlos. Aunque reconoce Santiago Pacheco, cada vez son menos.
"Es que ahora la industria moderna del calzado ha sustituido el cuero por el plástico, sustituyendo la calidad por la mediocridad, lo que no permite un punto de comparación en el cuidado del pie, pero lamentablemente la economía en muchas familias las orilla a optar por calzado sintético desechable", expresó.
¿Sabías que es un oficio con más de cinco mil años de antigüedad?
Según investigaciones hechas y vestigios encontrados el oficio de zapatero existe desde hace miles de años, el que se considera como el zapato de cuero más antiguo del mundo tiene cinco mil 500 años y se ha encontrado en Armenia, es una pieza de cuero vacuno con cordones diseñado a medida.
➡️ También te puede interesar: Talabarterías, el arte del cuero que perdura en Tampico [Video]
En muchas partes del mundo se han encontrado restos, en los que se muestra un calzado elaborado. Un ejemplo de ello es en México, donde se puede ver a algunas estatuas de la civilización Olmeca de hace unos cinco mil años antes de Cristo, con una especie de calzado.
Las herramientas del reparador de calzado
Entre las herramientas que usa el zapatero se cuchillas de acero para cortar el cuero, martillo remendón o de asentar, el martillo galgo o fino para los tacones, la lezna, aguja, tenaza, la manopla para proteger la mano al momento de coser, horma de madera, estacas, la escofina para perfilar los tacones y el tripie para clavar el calzado.
Actualmente muchas de las herramientas han quedado en desuso y las técnicas se modificaron ante la aparición de los nuevos métodos de producción, del calzado de plástico, los tacones de goma o el calzado fabricado para usar y tirar.
¿Qué tipo de reparaciones de calzado realiza un zapatero?
Este zapatero trabaja actualmente en costuras de zapatos y tenis, cambio de suelas corridas y medias suelas, cambio de tapitas, pintado de calzado, donde la suela de baqueta y el neolite apenas si sobreviven. Porque ahora las suelas de caja predomina en la fabricación del calzado y han desplazado a las suelas tradicionales por el hule.
Suscríbete a la edición digital de El Sol de Tampico aquí
El zapatero asegura que su trabajo se sigue haciendo de forma artesanal, todo es hecho a mano, lo mismo la reparación del calzado, que en bolsos de mujer, mochilas, cinturones y todos los artículos de piel.
Es por eso que el trabajo de zapatero remendón es uno de los oficios que se niegan a desaparecer, ya que parece que reparar un zapato es cosa del pasado, por lo que si el deseo de las personas es reparar un buen zapato que quiera preservar al zapatero tiene que visitar antes que el taller tenga que cerrar.