El trabajo doméstico que realizan las mujeres mexicanas tiene un equivalente económico de 62 mil 288 pesos, ya que ellas destinan 74.8 horas de su día a las labores domésticas y de cuidados.
Suscríbete a la edición digital de El Sol de Tampico aquí
Lo que representa el 73.6% en términos de valor económico, mientras que los hombres dedican solo 25.2% de las horas de su día a estas labores, con un costo promedio de 24 mil 289 pesos debido a que es menor tiempo el que se ocupan en estas labores.
De acuerdo con la Cuenta Satélite del Trabajo No Remunerado de los hogares en México presenta por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), la colaboración realizada por los menores entre 5 y 11 años de edad tiene un valor de 5,712 pesos en niñas y en niños de 5,395 pesos.
Cuando la mujer es casada y con hijo el valor de su trabajo en el hogar sube a 80 mil 744 pesos y si atiende a una persona enferma se incrementa.
En los últimos 11 años el tiempo que las personas destinan a las actividades no remuneradas que realizan en sus hogares se ha incrementado y por tanto su contribución a la economía a partir de los servicios que se generan.
Al valorar económicamente el tiempo de esas actividades se observó que su participación pasó de un equivalente al 19.3% del PIB del país en 2008 a representar el 22.8% en el PIB del 2019, las aportaciones de las mujeres han aumentado de 15 a 16.8%.
En cuanto al empleo remunerado en cuidados y apoyo a otros miembros tuvo una baja de 31.3% a 28.9% en 2019, las actividades de limpieza, cuidado de ropa, calzado disminuyeron de 9 a 7.7%, el resto de las actividades se ha reducido su participación, como resultado de una redistribución del valor y el tiempo destinado a cada actividad.
El trabajo doméstico no remunerado alcanzó un valor económico en 2019 de 5.6 billones de pesos y equivale al 22.8% del PIB nacional, las mujeres aportaron el 16.8% y los hombres 6 puntos.
Preparar los alimentos fue la actividad que absorbió más tiempo, seguido de la limpieza y mantenimiento a la vivienda, en tercer lugar el lavado de ropa y calzado, y en cuarto lugar las compras y administración del hogar, y por último el cuidado y apoyo.
