Integrantes de la Asociación Tamaulipeca de Antigüedades y Coleccionistas (ATAC) efectuaron una expedición a la región del Altiplano en Tamaulipas donde manifestaron haber fotografiado al menos ocho catacumbas debajo de una iglesia.
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“Habíamos recibido el rumor de que en algunos municipios del Altiplano existían algunos túneles secretos u ocultos (…) por fin encontramos una pista que nos llevó a Bustamante”, expresaron mediante redes sociales enfatizando que fue precisamente en la Iglesia de San Isidro donde realizaron la exploración subterránea.
“El rumor decía que era un túnel que comunicaba con la iglesia del pueblo y la hacienda que estaba justo enfrente, un túnel de aproximadamente unos 25 metros”, detallaron recordando que al encontrar la iglesia, los cuidadores y ejidatarios accedieron y los orientaron en la búsqueda cuyos resultados fueron catalogados por la ATAC como fructíferos.
“Encontramos un pequeño orificio en el suelo ubicado en una bóveda lateral de la iglesia(…), al retirar el material obstructivo vimos la entrada, la cual daba a una cámara subterránea dónde se encontraba algunos adornos religiosos y veladoras vacías”, destacaron este martes 9 de marzo en su cuenta de Facebook.
En este sentido, subrayaron que “lo sorprendente fue que en el suelo de esa cámara había otro orificio para una segunda cámara o bóveda subterránea a la cual era muy difícil de bajar(…), cuando por fin pudimos entrar a ese cuarto totalmente oscuro y con mucha falta de aire encontramos en sus paredes ocho catacumbas, así es, eran ocho gavetas para restos funerarios o cadáveres, los cuales tenían un poco más de metro y medio de profundidad”.
Los miembros de la asociación añadieron que al indagar sobre su origen, los pobladores les comentaron que la iglesia se construyó sobre una pared previamente edificada y que el ejido Felipe Ángeles de Bustamante fue fundado hace más de un siglo.
“Sin duda Tamaulipas y sus ejidos nos siguen sorprendiendo con grandes historias y misterios. Si llegan a visitar este lugar, favor de ser muy amables, pedir permiso para entrar y llevar equipo de protección, ya que el acceso es difícil y algo peligroso”, concluyeron los investigadores.