Manos salvadoreñas, guatemaltecas, hondureñas y haitinas trabajan diariamente en lo que será el nuevo albergue para migrantes que se construye en el municipio de Reynosa, en la zona fronteriza de Tamaulipas.
Lo hacen por querer contar con un sitio más digno para vivir, ya que actualmente se encuentran alojados en un improvisado campamento ubicado en la Plaza de la República, en la zona centro de este violento municipio tamaulipeco.
“No recibimos pago, pero realmente lo hacemos con la esperanza de poder tener un mejor sitio para nuestras esposas e hijos en lo que esperamos una respuesta de Estados Unidos”, dijo Matías Melchor, procedente de Guatemala.
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El sitio está pensado para erradicar las condiciones inhumanas y problemas de salubridad entre la población migrante, ya que donde actualmente están sobreviven hacinados, entre enfermedades y riesgos por inseguridad.
MIGRANTES CONFÍAN QUE EN ABRIL INICIE LA MUDANZA
El sitio registra 85% de avance, según indicó el dirigente de la Casa del Migrante Senda de Vida, Héctor Silva de Luna, quien señaló que la condición en la que viven hoy en día los extranjeros es inhumana.
Se espera que en este mismo mes comience la mudanza, lo que ha despertado en algunos de los más de tres mil migrantes que están en la Plaza de la República la negativa para moverse al nuevo sitio.
Este albergue en construcción tiene aproximadamente 17 mil metros cuadrados, está ubicado a espaldas de la colonia Aquiles Serdán de Reynosa, en la margen del río Bravo, el que se desarrolla con recursos municipales y federales.
Es edificada por los migrantes que habitan en el refugio Senda de Vida y podrá refugiar un promedio de tres mil 400 personas de varias nacionalidades mientras resuelven su proceso de asilo político con Estados Unidos
COLABORAN ORGANIZACIONES DE ESTADOS UNIDOS
En este se cuenta además con la colaboración de organizaciones humanitarias de Estados Unidos, quienes se han mantenido atentas al desarrollo de este nuevo sitio para albergar a migrantes.
“Nosotros nos comprometimos con el gobierno, con las organizaciones de los Estados Unidos a trabajar en conjunto para abrir un nuevo albergue, ahorita ya llevamos 85%, creemos que todas las familias que están en la plaza se van a trasladar a un nuevo albergue”, dijo Héctor Silva.
Este nuevo refugio amplio “no es un lugar en donde los tengan prisioneros, sino que estarán todo aquel que así lo decida, pero si se les está invitando a que cuando esté listo acudan y tengan una mejor estancia”, remató.
