Matamoros, Tams.- Desesperadas por no tener respuesta a su asilo político por parte de autoridades norteamericanas, madre e hija intentaron cruzar el río Bravo nadando en su desesperación por tener una mejor calidad de vida.
Este lunes, Melanie "N", de 11, y su madre Melvy "N", de 27 años de edad, se mostraron impacientes y decidieron aventurarse para cruzar el río Bravo nadando.
Sin importar la presencia de los elementos de la Guardia Nacional (GN) y personal de Protección Fronteriza de Estados Unidos (U.S. Customs and Border Protection, CBP), la mujer y su pequeña se lanzaron a la aventura.
A mitad del turbulento afluente las dos mujeres se quedaron varadas porque el agua les llevó al pecho; uniformados mexicanos las siguieron protegiéndolas en todo momento.
Mientras tanto, un agente de la Patrulla Fronteriza prometió a Melvy que si ella regresa a la orilla, le permitía ingresar a Estados Unidos, por el puente.
Después las llevaron a tierra firme y autoridades norteamericanas cumplieron su promesa según testigos.
La pequeña Melanie y su madre Melvy, salieron un 22 de mayo del año en curso desde Guatemala, y al menos siete días tardaron para llegar a México.
Según versiones de las mujeres centroamericanas, salieron de su lugar de origen por las amenazas que sufrían y la inseguridad en su ciudad.