Pueblo Viejo, Ver. La crisis por sequía ya comenzó a causar estragos en el ganado de la zona ejidal del municipio de Pueblo Viejo, donde la falta de agua y pastos está provocando que los animales comiencen a caer y tengan que ser auxiliados por los productores para evitar que mueran.
GANADO DESFALLECE POR HAMBRE
Esto sucede en el ejido Benito Juárez, donde el ganado que ha perdido peso, ha comenzado a desfallecer debilitado por la falta de alimento, lo que provoca que los vaqueros encargados de su cuidado tengan que intervenir los y proporcionarles el agua, el pasto y si es necesario mantenerlos de pie como sea posible.
Así lo dio a conocer León Almazán Zavala, comisariado del ejido Benito Juárez, quien señaló desde el mes de noviembre el ganado comenzó a perder peso por la escasez de pastos, además de mermar sus fuerzas por la falta de alimento y en un determinado momento el animal se tumba cuando siente que ya desfallece y ahí puede morir.
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Los encargados de los ranchos y los propios productores están al pendiente de los animales, sobre todo en aquellos potreros en donde el pasto se ha secado y no tienen que comer, así como tampoco que beber por que el agua también escasea, para ver que los animales sigan de pié.
LOS POTREROS SIN PASTOS
Explicó el comisariado ejidal que esto sucede principalmente en las vacas viejas, que son las principales víctimas durante la sequía, ya que no tienen las fuerzas suficientes para buscar alimento y se tiran, de no ser encontrados ahí pueden morir y no darse cuenta hasta 10 después cuando ya están secas y quedan puros huesos.
Hasta el momento no se ha tenido reporte de alguna animal muerto por sequía, o al menos no los han encontrado, dijo León Almazán, por lo que los ganaderos están al pendiente de sus rebaños, dándoles pastura los que así pueden adquirirla, así como comprar el agua, y los que no pueden por la falta de recursos económicos se encomiendan a Dios.