Tampico Alto, Ver., enero 2(OEM|Informex).- Comenzó la cosecha de jícama en los municipios de Pueblo Viejo, Tampico Alto y Ozuluama en la zona norte de Veracruz, donde los productores prevén recoger aproximadamente 4 mil 500 toneladas de esta leguminosa que actualmente alcanza un precio en el mercado de 7.204 a 8 pesos por kilo.
Jaime Cervantes González, productor, recordó que la cosecha de jícama comenzará en la zona norte de Veracruz, entre los meses de enero y febrero, fechas en las que confían puedan desplazar su producción a los mercados destino dentro y fuera del país.
Estima que en el presente año disminuyó en un 10% la superficie destinada al cultivo de este tubérculo, por lo que productores de Ozuluama sembraron 220 hectáreas, en Tampico Alto 200, mientras que en el municipio de Pueblo Viejo 80, que suman 500 hectómetros cuadrados de jícama.
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Para este ciclo de siembra, muchos de los productores de esta leguminosa decidieron disminuir la superficie de terreno de siembra entre un 20 y un 30%, debido a las condiciones de descapitalización de muchos de ellos, que no pudieron vender las cosechas anteriores a buen precio y muchos ni la levantaron porque no había mercado.
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Pequeños productores del norte de Veracruz se mantienen sin apoyos oficiales
En la zona norte de Veracruz existen aproximadamente 100 pequeños productores, desde los que cierran una hectárea, hasta los que cultivan 50, lo cuales no cuenta con ningún apoyo por parte de los gobiernos federales o estatales, sin programas que les aporten algún beneficio, todo lo están cubriendo con recursos propios con lo que apoya a los jornaleros de los cuales dependen igual número de familias.
¿Cultivo de jícama en el norte de Veracruz podría desaparecer?
Cada año los productores de jícama en la zona norte de Veracruz pierden capacidad de siembra, los elevados costos de insumos, fertilizantes y demás implementos necesarios para lograr mantener un cultivo resultan más costosos, por lo que las ganancias que se obtienen son menores, lo que les impide poder ampliar las superficies de siembra, mantener las que cultivan, pero en muchos casos disminuye el número de hectáreas cultivables por productor.
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Por ello cada vez menos campesinos se dedican al cultivo de esta leguminosa, ya que la economía no les permite poder ampliar más hectáreas porque requiere mayor inversión, recursos que se arriesgan por efectos climáticos imprevisibles, que de ser adversos solo resultará en pérdidas, porque cada vez disminuye la superficie de siembra o se dedican a otras actividades económicas como la ganadería orillando a este cultivo a desaparecer, al menos como actividad económica, para quedar como cultivo de traspatio.
Beneficios de la jícama
La jícama es una leguminosa rica en potasio, magnesio, calcio, vitaminas C y del complejo B. Es capaz de fijar el nitrógeno atmosférico, reincorporándose al suelo y beneficiar la tierra para otros cultivos.