En Tamaulipas hay 987 estudiantes que cursan una carrera relacionada con el tema de las energías, los cuales están en la incertidumbre sobre su futuro profesional ante el impulso de la Reforma a la Ley del Sistema Eléctrico por parte de la Federación.

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La coordinadora del programa académico de ingeniería en Energía de la Universidad Politécnica de Altamira (Upalt) Esther Bautista, indicó que “estoy segura de que tienen duda de que va pasar con su futuro laboral, porque le apostaban a las energías renovables como nosotros apostamos por ellas”.

La catedrática agregó que los académicos apostaron también por estas energías y se alinearon con los indicadores internacionales, tal y como señala la agenda 2030 de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en el objetivo 7, donde se habla de garantizar energía asequible y sustentable para la población.

“Las universidades que manejamos un programa académico enfocado a las energías limpias tendríamos que cambiar y actualizar nuestra infraestructura y contenidos de estudio, para asegurar que haya una oferta laboral, esto para evitar una deserción de alumnos” dijo.

La especialista destacó que los egresados al ver afectados las fuentes de empleo en el país muy probablemente acepten trabajos y se vayan a residir al extranjero, “esta situación podría generar una fuga de cerebros y que en lugar de traer esa tecnología al país y al estado se vayan a otras naciones”.

Recordó que en el Foro Económico Mundial en 2019 México estaba en el lugar 37, pero actualmente está en el lugar 50, eso quiere decir que el país se está alejando del cumplimiento de los objetivos de la agenda 2030.

“La energía es un factor contribuyente para el cambio climático y representa 60% de las emisiones de gases de efecto invernadero, por lo que tendríamos que incrementar la huella de carbono en casa, colonia y ciudades, y por ello incumplimos con el objetivo de mitigar las consecuencias ambientales” lamentó.