Stanley Black & Decker anunció la donación de 50 mil dólares, así como Equipo de Protección Personal (EPP) en apoyo a los sistemas locales de salud y los esfuerzos comunitarios para combatir el COVID-19 en Reynosa,.
En esta planta se fabrica equipo esencial, como baterías y herramientas eléctricas, que se están usando en la primera línea de atención a la pandemia tanto en México como en el extranjero.
La empresa hace este donativo de 50 mil dólares a la Fundación IMSS en apoyo a los esfuerzos para combatir el virus. Además, Stanley Black & Decker ha solicitado, para el Hospital General y el Hospital Materno Infantil de Reynosa, 30,000 máscaras para su personal y para los trabajadores de primera línea, además de donar herramientas eléctricas para apoyar a los equipos de construcción y mantenimiento hospitalario.
“Esta es una época sin precedentes, nuestra prioridad es garantizar la seguridad y la salud de nuestros empleados, mientras seguimos haciendo lo que nos corresponde para ayudar a las comunidades y gobiernos a mitigar los efector del virus”, declaró Robert Backburn, Vicepresidente Senior de Operaciones Globales para Stanley Black & Decker. “Estamos cumpliendo con nuestra promesa a través de contribuciones filantrópicas y la manufactura de productos esenciales usados por los trabajadores de la salud y equipos de primera respuesta, al mismo tiempo estamos tomando todas las medidas posibles para asegurar que nuestras operaciones de manufactura sean tan seguras como sea posible”.