El gobierno federal mantendrá regulada hasta 2024 la importación definitiva de vehículos usados de Estados Unidos y Canadá, ingreso que por la pandemia ha registrado en este año una disminución del 29.6%.
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La Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores señaló que la actualización del decreto federal es buena para el sector automotriz del país, pues mantiene acotada el ingreso legal de automotores, aunque debe existir mayor vigilancia en las aduanas y limitar los carros “chocolate”.
Entre enero y septiembre pasado se llevaban vendidos 748 mil 501 unidades nuevas, equivalente a una baja de 29.6% y 313 mil 986 vehículos menos en comparación al mismo lapso de 2019.
En comparación con ello, durante el periodo de enero a noviembre de 2020, los vehículos usados importados representan el 13% de la venta de vehículos ligeros nuevos y en el año 2010 -el periodo de mayor control- representaron solo el 8%.
En este sentido, la AMDA señaló que el decreto actual vigente desde el 1 de julio de 2011 ha sido un instrumento valioso para regular la importación definitiva de vehículos usados a nuestro país.
Así se confirma al observar que durante el periodo de 2006 a 2008 la importación de vehículos usados fue 18% superior a la venta de vehículos nuevos en el país como consecuencia de una apertura indiscriminada que llenó al país de basura automotriz.
Guillermo Rosales, director de la asociación manifestó que “seguiremos colaborando con el gobierno federal para que exista un mercado ordenado de vehículos usados en el que persistan condiciones que brinden seguridad jurídica y apego a la legalidad para desarrollar un comercio complementario al de vehículos nuevos”.
Por su parte, la Asociación de Importadores de Autos de Matamoros que dirige Tomás González dijo que ese decreto es insuficiente, pues es necesario facilitar la importación de vehículos extranjeros, porque hay un incremento considerable en la introducción ilegal de automotores hacia esta entidad, sin que sean reguladas por autoridades de tránsito, oficiales de la Guardia Nacional y el propio SAT.
