A pocas horas de que se retire el Título 42, lo migrantes siguen cruzando de forma ilegal el río Bravo, ante la mirada de representantes del Instituto Nacional de Migración (INM) y las súplicas de los activistas que advierten del peligro que esto implica.
Este próximo 11 de mayo se contempla el retiro del Título 42 en Estados Unidos, medida que permitía el retiro inmediato de las personas que ingresaban legalmente a Estados Unidos por razones sanitarias ante la pandemia del Covid-19.
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“Están muy desesperados, no saben lo que viene, sin embargo, nosotros siempre estamos pidiéndoles que no se crucen, les insistimos”, declaró a EL SOL DE TAMPICO, la activista defensora de migrantes, Glady Cañas.
“No solo son ustedes, hay una hija que los espera en casa, hay una madre que los espera en casa y no es posible que esa madre reciba un féretro o una unas cenizas, ¿por qué? Porque ya están desesperados, hay gente tiene 9 meses o un año esperando aquí... No se vale que sus sueños se queden en ese río”, dijo a los migrantes en una celebración religiosa que se realizó en el campamento migrante de Matamoros.
Acusan que Estados Unidos confunde a migrantes
La activista explicó que pese a que las autoridades de Estados Unidos afirman que toda persona que ingresa de forma ilegal será retornada, algunas personas que llegaron cruzando el río han sido admitidas para que lleven su juicio migratorio en este país, situación que incita a los migrantes a cruzar.
“El problema es que Estados Unidos no unifica sus criterios; a unos los deja pasar y a otros no, provoca esta avalancha de migrantes que crucen el rio, sin medir las consecuencias a costa de su propia vida, eso es lamentable, también”, señaló.
Señaló que esto se contrapone al mensaje que dan los activistas de cruzar de forma legal.
“¿De qué sirve que nosotros luchemos para que no pasen? Cuando ellos están facilitando la entrada dejando entrar a unos y a otros no”, explicó.
Migrantes admitidos los incitan a cruzar
Puntualizó que los migrantes que han sido admitidos y que llegaron por el río Bravo para entregarse a la patrulla fronteriza son quienes les dicen a sus connacionales que se animen a nadar y cruzar el Río Grande, nombre que se le da a este afluente en Estados Unidos.
“La comunicación se corre, los mismos migrantes les mandan audios diciéndole, 'pasen, no se queden' y ahí es donde nosotros perdemos terreno”, detalló.
Opinó que pareciera que por parte de los países hay una simulación al decir que están preocupados por esta crisis.
“Las políticas migratorias tratan de cubrir, hacen como trabajan y realmente no atacan el problema de fondo”, sostuvo.
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Mientras que finaliza el Título 42, los migrantes ven en el río Bravo la posibilidad de llegar y quedarse en el otro lado.
