Migrantes que abandonaron el campamento de Matamoros, ahora vuelven a sus puertas para solicitar información y pedirles a organizaciones que no los dejen afuera de la aplicación de pruebas Covid-19.
Suscríbete a la edición digital de El Sol de Tampico aquí
En los últimos 2 días, la afluencia a este lugar ha aumentado por lo que fue necesario cerrar sus puertas; se trata de personas que en algún momento vivieron en este lugar pero que se fueron a rentar y trabajar en la ciudad.
Modesto Galo, de nacionalidad hondureña, explicó que nunca se fue del campamento debido a que pensaba que en cualquier momento podría ser llamado a cita.
"Mi última cita fue a principios del año pasado, uno llega al cruce peatonal, presentamos un papel y nos dejan pasar a donde está la corte, es el único momento en que pisamos Estados Unidos", explicó.
Dos de sus hijos y algunos de sus hermanos están en Estados Unidos, así que recibe apoyo económico, sin embargo, le angustia la suerte de su esposa e hija que se quedaron en Honduras.
"Hace unos días afuera de la casa donde ellas están mataron a una persona a machetazos y nadie puede hacer algo; ellas se encerraron", declaró.
Él nunca se ha ido del campamento y se encuentra acogido dentro del MPP (Protocolo de Atención que Migrantes, por sus siglas en inglés) por lo que no está desesperado de ingresar al portal https://conecta.acnur.org. pues teme que se sature.
Mientras, sale a los puertas del campamentos para darle pocas noticias a sus compañeros que regresan por información.
"Aquí no se batalla tanto por comida, las organizaciones nos han ayudado mucho; el problema es lo emocional, lo psicológico, eso es lo que nos daña, es lo difícil", señaló.
Afuera de este lugar que tiene como vecino al Río Bravo, se han presentado algunos incidentes, un hombre salió a reclamarle a un reportero una noticia sobre que los hondureños le habían cerrado las puertas a los mexicanos.
Aunque el reportero se defendió con el argumento de que él vio un caso, el centroamericano se retiró, molestó, entre gritos.
"Son cosas que pasan, es el nervio, no va pasar a mayores, todos estamos a la espera", opinó Galo.