Luego de caídas fuertes en materia de empleo las obras de construcción empiezan a recuperar terreno en este rubro con las licitaciones, señaló Eduardo Ramírez, presidente Nacional de CMIC.
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“Hay 3,600 contratos a nivel federal que están activos para obra pública, hemos regresado con el 70 % de todo lo que teníamos antes de la pandemia en trabajo”.
Ramírez Leal señaló que el 20 % de las obras activas en la construcción provienen de recursos públicos y el 80 % es de inversión privada.
Durante junio la construcción presentó un avance en la generación de empleo formal, al tener un incremento del 7.2 % respecto al mes previo de acuerdo con datos del IMSS. En el resto de las actividades económicas hubo descensos. Del total de lo generado en la construcción el 61 % fueron empleos eventuales, lo cual es un reflejo de que las obras que pararon en abril y mayo volvieron a sus actividades recontratando trabajadores.
“A partir de 1 de julio en el país regresó el 60 % de todo lo privado en obra pública, porque en la obra privada hay incertidumbre porque no se sabe cuándo se termina la pandemia y los parques industriales, edificios de uso combinado de oficina y vivienda tienen un panorama incierto y algunos han comentado que posterguen sus inversiones, dependerá de lo que dure la pandemia, la CMIC revisa que el recurso público federal se ha aplicado muy lentamente”.
Advirtió que han estado más activas obras como el corredor interoceánico, el tren maya y la refinería Tula, afirmó que o han sido pocas empresas las beneficiadas.
“La industria de la construcción se siente rezagada y no tomada en cuenta en todo el país”.
Dijo que pronto se reunirán con Alfonso Romo, jefe de la oficina de Presidencia para pedir que se formalice la participación de constructores en todos los sectores, ya que es importante apostar a un diálogo permanente con las autoridades federales.
