La comunidad empresarial protestó por la concentración de trámites en las distintas sedes del Servicio de Administración Tributaria, que hará más complicado el cumplimiento fiscal, como sucede en oficinas de Reynosa y Matamoros y probablemente en Tampico.
El C.P. José Joel Gómez Velazco, vicepresidente de la Federación Estatal de Cámaras de Comercio, expresó que en el caso de Matamoros han sido informados sobre los cambios en Matamoros, de donde una gran cantidad de trámites serán pasados a Reynosa, situación que lejos de beneficiarnos perjudicará enormemente a esta ciudad que por su importancia debe contar con su propia oficina del SAT.
Áreas clave de la SHCP como la Jurídica y Auditoría se mudarán en su totalidad a Reynosa y el área de atención operará con menos personal con un sub administrador que dependerá del administrador de Reynosa, criticó.
Estos cambios definitivamente son un retroceso y no pueden ser buenos para la economía fronteriza generando mayor problemática y burocracia para todos aquellos trámites que requieran presencia del contribuyente, por lo que las Cámaras de Comercio realizan gestiones ya ante la SHCP con apoyo de su confederación para buscar dar reversa a esta medida.
De igual forma no ha causado buena impresión el nuevo administrador regional de Atención al Contribuyente que tiene a su cargo las oficinas de Matamoros y Reynosa, toda vez que en la pasada reunión de síndicos este demostró no tener perfil ni conocimientos sobre temas tributarios, indicó.
Para el sur de Tamaulipas es probable que se concentren trámites de las sedes de Tuxpan y se desconocen si serán reducidas algunas áreas que son muy importantes para la atención a los contribuyentes.
El presidente de la Canacope Tampico, Luis Enrique Lara, señaló que hay versiones en el sentido de reducir la plantilla de personal de la oficinas del SAT local, lo cual no es criticable, sino que se haya complicaciones para los trámites que deben hacer los contribuyentes Personas Físicas o Morales.
Explicó que una demanda permanente de los empresarios es reducir el gasto corriente, pero la propuesta es que eso no sacrifique tiempo y trámites de los pagadores de impuestos.
