“Llénalo hasta el tope” es una de las expresiones más comunes cuando se acude a una estación de servicio a cargar combustible, donde incluso algunos “agitan” la unidad para que le quepa más, sin embargo, tiene sus inconvenientes.
Entre ellos están posibles daños en los actuales sistemas de llenado de las bombas despachadoras en materia de seguridad y ecológicas, pero también la protección del automóvil.
DAÑOS A LOS SENSORES EN LOS AUTOMÓVILES
En ese sentido como propietario de una unidad motriz debemos saber que en los últimos cinco años algunos vehículos están equipados con conductos de desagüe, precisamente para evitar el sobrellenado de las unidades.
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Además, el sistema operativo de las mangueras al detectar sobrellenado regresa un poco del combustible a la bomba, por lo que detectan cambios en la presión del aire conforme el tanque se va llenando a la capacidad recomendada, lo que puede generar daño en los sensores.
RECOMENDACIONES PARA CARGAR GASOLINA
Si bien se quiere aprovechar el máximo de combustible por el que se ha pagado, lo recomendable es mantener el límite indicado.
Ajustarse al llenado recomendado previene derrames de combustible en la estación de servicio, lo que bajo ciertas circunstancias puede resultar peligroso.
A la par, algunos automóviles cuentan con sofisticados sistemas para detectar y evacuar vapores de la gasolina ubicados encima del límite permitido, por lo que no se recomienda que un sobrenivel de la misma debido a que los puede afectar y la reparación costará varios miles de pesos.