En ocasiones los transeúntes deciden no usar los puentes peatonales, en su lugar prefieren cruzar la calle, librando una danza incierta y temeraria contra las decenas de vehículos que circulan a toda velocidad.
El resultado muchas veces es catastrófico e irremediable. ¿Por qué a pesar del peligro no se usan los puentes peatonales?
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Tampico y sus puentes peatonales
Los factores para el poco aprovechamiento de los pasos seguros son varios, van desde la falta de cultura vial, hasta problemas de movilidad física, falta de determinación y propensión a la inactividad.
A pesar de su falta de popularidad entre la sociedad de la zona conurbada, un sector de la ciudadanía si aprovecha esta clase de infraestructuras. Durante los periodos escolares es usual ver a decenas de estudiantes cruzando los puentes ubicados en el bulevar López Mateos y en la prolongación de la Avenida Hidalgo.
Sin embargo, los puentes localizados en la carretera Tampico-Mante apenas y son utilizados. En su lugar, los peatones optan por atravesar los camellones de una de las arterias más concurridas de la zona conurbada. Dicha decisión parece ignorar el peligro.
Por dicha vía transitan cientos de vehículos tanto ligeros como pesados, circulan desde motocicletas, carros, camionetas, camiones, trailers y remolques. Aún así, los puentes de la carretera Tampico - Mante lucen vacíos. Caso similar se presenta en la Avenida Ejército Mexicano.
Los derechos y obligaciones de los transeúntes
La Constitución de los Estados Unidos Mexicanos señala en el artículo cuarto: “Toda persona tiene derecho a la movilidad en condiciones de seguridad vial, accesibilidad, eficiencia, sostenibilidad, calidad, inclusión e igualdad”.
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Por su parte, el Reglamento de Tránsito del Estado de Tamaulipas indica en el capítulo octavo artículo 116: “Con las limitaciones que señala este Reglamento, los niños, ancianos, minusválidos y peatones en general tendrán preferencia en la circulación”.
El artículo 118 prohíbe: “Cruzar en avenidas y calles de intenso tráfico, por lugares que no sean esquinas o zonas marcadas para cruce de peatones”. Aunado a ello, el artículo 119 específica: “En los lugares donde haya pasos a desnivel para peatones, deberán hacer uso de ellos.”
No obstante de ser regulado por la ley, parece que el uso de puentes peatonales no forma parte de la cultura vial de la población.
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El mundo vive a gran velocidad
“Imáginate, yo voy aquí enfrente. Si quisiera usar el puente, tendría que caminar cinco cuadras, subir las escaleras, después bajar y volver a caminar otras cinco cuadras de regreso. ¿Por qué voy a hacer eso? Es una pérdida de tiempo y de esfuerzo. Yo vengo cansada, lo que quiero es llegar a mi casa”.
Así responde Ana Laura Gómez, de 29 años, madre de familia de tres hijos, quien trabaja como dependienta en una tienda de ropa sobre la carretera Tampico-Mante.
“Claro que me da miedo. Observas como un mar de carros se acerca a ti, pero, ¿qué haces? Aguantar. Es lo que hacemos todos. Vas cruzando por tramos la calle. Tienes que ser rápido y estar a las vivas, aprovechar la oportunidad, sino los carros nunca te dejan pasar”, contesta Gómez después de ser interrogada sobre si no le preocupa ser atropellada.
Al otro lado del escenario tenemos a Juan Antonio Ramírez, de 49 años, chófer de carro de ruta desde hace 20 años: “El problema es que a veces no sabes por dónde va a salir la gente.
Vas manejando y de repente ves que en mitad de calle sale alguien corriendo, intentando llegar al otro extremo, como automovilista puedes reducir un poco la velocidad, pero no demasiado y, por supuesto, tampoco puedes frenar. Detrás de mí vienen otros carros, si vienen muy pegados y yo me detengo, esos vehículos se estampan contra mí”.
“Además, a veces es más peligroso cederle el paso a un peatón que intenta cruzar a mitad de calle. Piensalo, yo vengo por el carril derecho, veo que alguien intenta llegar al otro lado de la avenida, entonces, por buena gente, conduzco más despacio.
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¿Qué pasa si los carros que vienen detrás de mí me rebasan? Como ellos no ven al peatón, porque mi vehículo les tapa la vista, cambian de carril, aceleran por el lado izquierdo y entonces tienen que frenar de improviso porque al fin se percatan de la presencia de la gente. Es muy peligroso”.
Al preguntar a Juan Ramírez por qué muchos conductores no se detienen en intersecciones de calles a pesar del alto de precaución, él argumenta “Si es por la mañana, vamos al trabajo. Si es por la noche, vamos a casa.
Primero vas con prisas para que no te descuenten o se te haga tarde. Luego vas cansado y fastidiado con ganas de descansar. La verdad no se piensa mucho en el prójimo cuando tienes hambre y sueño acumulado.”
“Yo aunque quisiera no puedo usarlos. Las rodillas ya no me responden. Me canso mucho de caminar o de estar parada. Además, si me caigo ¿quién me va a ayudar? Aquí cómo puedo atravieso, espero que no venga nadie.
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Hay momentos donde la calle está sola. Te acostumbras, conoces los horarios. A eso de las siete y media de la noche baja un poco el tráfico”, apunta Elvia Medina Hernández, de 57 años, quien atraviesa seis días a la semana la Avenida Hidalgo a la altura del Parque de las Artes para ir de su casa al trabajo.
Las ventajas de usar los puentes peatonales
La Organización Mundial de la Salud recomienda a los adultos realizar mínimo 150 minutos de actividad física moderada para percibir una disminución de los síntomas de depresión y ansiedad, además de fomentar la salud del sistema respiratorio y cardiovascular.
Caminar aunado a subir y bajar escaleras se consideran ejercicios aeróbicos con la capacidad de quemar grasa, aumentar la capacidad respiratoria y fortalecer los músculos.
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¿Cómo se debe atravesar la calle?
Acorde a los Art. 118 y 119 del Reglamento de Tránsito del Estado de Tamaulipas, son:
- Cruzar en las esquinas o zonas marcadas para cruce de peatones
- En los lugares donde haya pasos a desnivel para peatones, hacer uso de ellos
Ventajas de usar puentes peatonales
- Evitar accidentes viales y sus posibles daños físicos, materiales y mentales
- Realizar ejercicio físico
- Disminuir síntomas de depresión y ansiedad
- Aumentar la capacidad de respiración
- Tonificar la silueta
- Posible pérdida de peso
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A pesar de cuidar de la integridad física de los transeúntes, en ocasiones la ciudadanía elige no usar los puentes peatonales y cruzar, en ocasiones, a mitad de calle.
