La crisis económica provocada por la paralización de actividades productivas debido a la contingencia sanitaria, puede provocar un aumento en la comisión de delitos patrimoniales.
El regidor Alberto Sánchez Neri, integrante de la comisión de protección civil y seguridad en el Cabildo porteño, señaló que debido a que muchas personas no están trabajando por el cierre de los negocios que no son de giros esenciales, en numerosos sectores existe el temor de que esto cause un incremento en delitos como robos y asaltos.
Dijo que en varios sectores en los que ha acudido a repartir despensas a familias vulnerables junto con la regidora Lluvia Ortega Maldonado, la gente manifiesta tener miedo por los robos de los que pudieran ser objeto, ya que hay muchas personas que empiezan a desesperarse.
“Si, sobre todo en posible delincuencia en el sentido de robos, la gente tiene miedo porque entiende que hay muchas familias que están desesperadas y que pueden llegar robar, es un tema de desesperación y es una desesperación. Ese es un tema que se nos puede llegar a presentar o está registrando y tenemos la autoridad desde el gobierno federal y el estatal de implementar estrategias para esa situación, pero sobre todo los apoyos, reactivar la economía, los empleos para que la gente esté tranquila y no las llevemos a esos extremos de atentar o robar por una necesidad que se tienen”, señaló.
Agregó que también se está registrando la situación de que aprovechando los cubrebocas, pueden incurrir en un ilícito.
“Yo no dudo que van a aprovechar este momento para abusar y tomarlo como excusa. Sin embargo, también hay una gran parte de gente que desafortunadamente se empieza a desesperar y eso es lo más preocupante de esto, por lo que ojalá pronto lo superemos y que el gobierno tenga la capacidad de responder a las demandas de la ciudadanía”, apuntó.
Sánchez Neri consideró que es necesario que autoridades federales y estatales se coordinen para establecer un mecanismo de vigilancia, especialmente en los sectores en donde la falta de actividad económica ha dejado vacías las calles y muchos negocios expuestos a ser afectados por robos.
