Capitanes, güincheros, pacotilleros, motoristas y cocineros queintegran la tripulación de cada barco de la flota camaronera de lazona sur de Tamaulipas llevan ya varios años de navegación, porlo que en buena medida sobrepasan los 50 años de edad.
Son personas con gran capacidad que han logrado adquirir con lasdécadas de experiencia enfrentándose a las complicaciones y retosinesperados que representa el mar, pero a los armadores les urgepoco a poco ir renovando la mano de obra.
El secretario de Pesca en Tamaulipas, Raúl Ruiz Villegas,indicó que “estamos enfrentando una carencia fuerte de mano deobra, ¿por qué? Porque nuestros pescadores se han ido haciendoviejos y no tenemos el reemplazo de manera inmediata”.
Para ir mejorando de manera paulatina esa situación laautoridad estatal ha establecido un plan con el Centro de EstudiosTecnológicos del Mar (CetMar), con sede en Ciudad Madero, paracapacitar a los estudiantes en técnicas y acciones reales de lapesca de camarón.
Un grupo de armadores tampiqueños han apostado en invertircerca de 400 mil pesos en la reparación del barco escuela“SepMar”, en el cual se pretende formar a las nuevastripulaciones, ya que además de la parte teórica y técnica quereciben en el plantel podrán experimentar la actividad real ennavegaciones de instrucción.
Es un proyecto a mediano plazo “ya que esos jóvenes-estudiantes del CetMar- pudieran ser nuestro reemplazo, hubo unageneración que se nos perdió, pero estamos tratando derecuperarnos y poder poco a poco inyectar sangre nueva a laflota”.
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El “SepMar” permanecía en el olvido, ya que fue adquiridopor el plantel desde hace más de doce años, pero en el últimolustro no se le había dado el mantenimiento necesario, siendorescatado y subido a astillero en la colonia Morelos de Tampicopara su reparación integral.
Son un promedio de 185 barcos que integran la flota camaroneraque sale cada año del puerto de Tampico a capturas en el Golfo deMéxico, cada uno con por lo menos cinco trabajadores, entre losque se cuenta el capitán, güinchero -quien maneja las poleas ogrúas para levantar las redes, conocido como güinche-, motorista,cocinero y pacotillero.
En la extracción de la especie se emplean a 925 personas, delas cuales por lo menos 10% -según estimaciones de la propiaSecretaría de Pesca- ya sobrepasan los 60 años.
“Van escalando esos puestos conformen van trabajando hasta quese hacen capitanes pero son empíricos; es diferente si pones a unmuchacho egresado de una escuela”, precisó.
Ruiz Villegas consideró que los conocimientos adquiridos en laescuela de especialidades del mar están acordes a las nuevastecnologías.
“es una situación completamente distinta de aprender en unaula a ser formado por la experiencia”.
En la flota camaronera hay capitanes de 35 a 60 años de edad,“hay una brecha de 20 años que se perdió y que debemos buscarla manera de ir en un proceso de capacitación de nuestra fuerzalaboral”, expuso el funcionario, que además es empresariopesquero de este puerto.
Se espera que la flota camaronera de esta zona sur de Tamaulipassalga a la mar en los primeros días del mes de septiembre que selevante la veda del crustáceo en aguas del Golfo de México y déinicio así la tradicional corrida del camarón.
