Imagínese un niño de cuatro años jugando “Call of Duty” -El llamado del Deber- un videojuego con temática bélica, pareciera algo totalmente descalificabable o dañino para un menor de esa edad, pero para José Alberto González Aranda se convirtió en su primer contacto con temas de interés global.

Justo de ahí surgió el gusto por leer tópicos relacionados con la Segunda Guerra Mundial, después la Primera y de ahí a todo lo relacionado con la globalización y el implicamiento multinacional.

Entre temas de poco interés para niños pasó su infancia, hasta llegar a la adolescencia y plantearse la meta de estudiar economía en la Universidad de Nueva York (NYU, por sus siglas en inglés) lo que hoy, a sus 19 años, es una realidad y no precisamente en el campus de Manhattan, sino hasta el otro lado del mundo, en Abu Dhabi.

Eligió la Escuela Americana de Tampico, ubicada en Tancol, para estudiar la preparatoria porque era la mejor opción para aplicar a universidades “gringas” y con apoyo de un consejero de la escuela se planteó la meta de ser aceptado en la escuela de uno de los siete Emiratos Árabes Unidos.

El centro comercial y petrolero del mundo es actualmente gobernado por el jeque Jalifa bin Zayed Al Nahayad, quien con una apertura a Occidente distinta al resto de las naciones musulmanas, abrió hace apenas ocho años un campus de la Universidad de Nueva York en sus dominios.

2 DE CADA 100

Ahí fue donde planeó José Alberto entrar, sabiendo que solo es aceptado 2% de los solicitantes, mientras que en universidades como Harvard ingresa 4% de los aplicantes.

“Realmente comencé a prepararme desde los 15 años, con muchos sacrificios pero teniendo la meta súper definida y afortunadamente se logró”, dijo el joven a El Sol de Tampico.

En esta generación de 20 mil solicitantes ingresaron 400, de estos solo 2 de México, el tampiqueño y una chica de familia mexicoinglesa radicada en Querétaro.

Para llegar a este punto fue necesario aplicar una variedad de exámenes, entre estos el Standard Aptitude Test (SAT) en cuyo primer intento no alcanzó el score necesario, pero en octubre del 2018 logró una puntuación de 1480 puntos, que es 99% del promedio, de un máximo de 1600.

“Me maté estudiando, esta universidad era el top, más era poco probable entrar, por lo que la exigencia fue al máximo”, refirió el joven que en diciembre del año pasado fue convocado a conocer el campus árabe donde conviven 130 nacionalidades.

Estudiará economía, más analiza la posibilidad de agregar ciencias políticas, con una beca de 4 años cuya aventura comenzó ayer lunes 12 de agosto que salió de Tampico con una travesía a México, Ámsterdam y finalmente Abu Dhabi, a donde llegará el 14 de agosto y podrá regresar a Tampico en dos ocasiones por año, en diciembre y verano.

“La clase de orientación empieza el 17, además de la compra de muebles, me enseñarán a detalle el campus y actividades de ambientación”, expuso José Alberto, quien forma ya parte de la matrícula de esta universidad de primer mundo.

NYU de Abu Dhabi, aunque apenas tiene ocho años de operación, ranquea entre las 30 mejores del orbe, con más del 90% de eficiencia terminal y enclavada en una zona con un clima que ronda los 46 grados centígrados promedio, es una Torre de Babel.

Aunque su segunda opción era Yale y Harvard “en esta Universidad me pagan por estudiar, al año nos otorgan unos 5 mil dólares, además de la comida, habitación, vuelos y transportes del campus”.

LOS ENSAYOS

Pero ser el mejor en promedio no lo es todo para ser aceptado en NYU, ya que la evaluación es integral desde actividades extraescolares hasta la manera de percibir al mundo.

Y esta percepción la captó en tres ensayos solicitados, el primero escribió sobre Call of Duty y como este juego bélico a los cuatros años le llamó la atención para interesarse en la historia; el segundo sobre la problemática de los perros callejeros de Tampico y cómo lo cambiaría.

“Mi objetivo en la vida es estudiar, capitalizarme y usarlo para cambiar Tampico o México, no quiero trabajar aquí, pero sí regresar y lo que vea en todos los países que conozca implementarlo en mi país. Muchos dicen que no amo a México, sé que es un país con gran cultura y diversidad natural, pero me enoja ver el potencial que tiene que no está aprovechado, me desespera que no capitalice”, reflexionó.

Y el tercer ensayo sobre la globalización donde aplicó lo aprendido en su participación en el Modelo de Naciones Unidas en Tampico, México y el extranjero,

FOCALIZARSE

Para José Alberto lo principal para lograr su sueño fue plantearse metas y seguirlas, incluso sacrificando lo que como a todo joven le gusta: las fiestas, el deporte y los viajes.

Recomendó a quienes estén por ingresar a preparatoria que “desde que empiecen se enfoquen, desde ese momento están trabajando para entrar a la universidad, de los 15 a 18 años son decisiones que afectarán toda la vida”.

Aunque su sueño no es quedarse a radicar en los Emiratos sí quiere hacerlo en un país de primer mundo, obtener mucho dinero y regresar a México para aportar en cambios radicales.

Entre los recuerdos de José Alberto están una no sencilla primaria, el desinterés de temas acordes a su edad y dejar los juegos de tazos por leer del conflicto iniciado por Hitler, mas hoy ve que todo valió la pena en su sueño cristalizado, surgiendo como un espejismo de entre las arenas del desierto, pero que es completamente real.

LÍNEA DEL TIEMPO

• 4 años juegos de video bélicos.
• 5 años comienza su interés por leer de la historia, concretamente la Segunda Guerra Mundial.
• 12 años se integra al Model United Nations (MUN)
• 15 años ingresa a preparatoria con la mira de estudiar en la Universidad de Nueva York.
• 16 años gana el premio de Mejor Negociador del MUN más grande de Latinoamérica.
• 17 años gana el premio de Liderazgo en el ITAMMUN.
• 19 años es aceptado en la NYU campus Abu Dhabi.

LAS NACIONALIDADES DE LA NYU

• 130 nacionalidades diferentes
• Emiratos Árabes Unidos el 19%
• Seguido de EU
• Corea del Sur
• Egipto
• India
• Paquistán
• Reino Unido
• Jordania
• China
• Polonia

Es mi sueño, lo que veía de chico, hasta cuando aplique nunca tenía la certeza que iba a entrar y se logró

José Alberto González Aranda