Con una reducción en sus ventas de hasta un 85%, el sector restaurantero está entre las actividades económicas más golpeadas por el Covid-19 en Altamira, situación que está agravándose debido a los repuntes de contagios y las restricciones de movilidad que esto conlleva, pudiendo originar cierre de establecimientos en los próximos meses de seguir las mismas condiciones.

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Un importante número de negocios han cerrado por la crisis tan grande que tenemos derivado de esta situación pandémica, algunos trataron de sobrellevarla con diversas estrategias pero la falta de infraestructura y el nulo apoyo que se tuvo por parte de las autoridades, hicieron que terminaran por quebrar los establecimientos.

Comenta Marcelo Abundis Ramírez, integrante del sector restaurantero en la urbe industrial, expresando que en coordinación con los demás empresarios se decidió recurrir al apoyo de las herramientas tecnológicas mediante las aplicaciones para teléfonos móviles, con el fin de hacer más eficiente las entregas a domicilio.

Mencionando que la solicitud de préstamos bancarios no son una opción para este tipo de negocio, ya que el contratar este tipo de recurso se genera un mayor déficit al estar contraída la economía y no saber cuando se reactivará, pues después de 3 meses de aislamiento social, se necesitan por lo menos 80 mil pesos para cubrir gastos extraordinarios en este tipo de empresas.

Actualmente son por lo menos 100 restaurantes en el municipio de Altamira que han optado trabajar a través de aplicaciones, ante el panorama que se presentan con los repuntes de contagios, sin embargo la crisis para el sector va en aumento pues las restricciones de movilidad afecta la economía también y la población está midiéndose en sus gatos.