Las emisiones de sustancias tóxicas a la atmósfera con la disminución de la movilidad urbana bajó a regular la calidad del aire en la zona metropolitana de Tampico, sin que eso signifique que no sea perjudicial para la población frágil, como; niños, ancianos o personas con enfermedades respiratorias, advirtió la asociación ambientalista Ciudadanos Conscientes en Acción por México.

De parámetros de mala o de riesgo para grupos vulnerables, que medían hace dos semanas aplicaciones de teléfonos móviles, porque en esta ciudad no hay estaciones de monitoreo del aire, hay una leve mejora, pero empresas como la refinería Madero y la de la zona industrial de Altamira mantienen la producción de cenizas y otras partículas con impactos en el medio ambiente y la salud humana, agregó el investigador de ese organismo Roque Ángel Montiel Lozano.

Es cierto que hay menor movimiento del parque vehicular del transporte público, empresas o familias, pero la calidad del aire sigue sin cumplir los estándares básicos, los cuales desde hace años en esta localidad son causa desde afecciones ligadas al sistema respiratorio, problemas cardíacos e inconvenientes en el sistema inmunitario, hasta cáncer y malformaciones congénitas, señaló el activista.

Mencionó que los numerosos elementos químicos presentes en los gases industriales y vehiculares, los más frecuentes son dioxinas, naftalenos policlorados, hidrocarburos aromáticos policíclicos, compuestos orgánicos volátiles y metales pesados como plomo, cadmio y mercurio y la mayoría de ellos quedan muchos suspendidos en el aire.

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