El recorte de programas para el campo en 2021 traerá un panorama más complicado para este sector prioritario en nuestro país.
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Se eliminaron 12 mil millones de pesos del Fondo de Financiera Rural, además del Fondo para Desastres Naturales por 6 mil 861 millones de pesos, y de un programa para siniestros agropecuarios por 4 mil millones de pesos, lo que deja en la indefensión al productor mexicano ante el cambio climático y los riesgos de las plagas.
Toribio Cruz, representante de productores del campo en Altamira, consideró que el escenario es catastrófico para el 2021.
“Hay 80 mil toneladas de sorgo que se producen anualmente en Altamira, este año difícilmente se producirán de 30 a 40 mil, una baja del 50% en la producción de sorgo que se vende principalmente para las industrias de aceites comestibles en todo el país”, lamentó.
De acuerdo con cifras del Consejo Nacional Agropecuario, el país es dependiente en 97% de la importación de soya, en 83% de arroz, 66% de trigo y 37% del maíz.
Para el siguiente ciclo podrían dejar de cultivarse unas 350 mil hectáreas, acción que sería un golpe devastador para el campo tamaulipeco.
