¡Mamás al rescate! Llevan galletas, cafecito y agua a abuelitos en la UAT

El grupo de nueve mamás se hace llamar “Team La Pandilla”; ellas buscan dar a sus pequeños una lección de vida: siempre se puede ayudar

Eugenia Gómez | El Sol de Tampico

  · jueves 15 de abril de 2021

Durante el martes 13 de abril acudieron a la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT) a enfrentar más de 200 botellas con agua fría y galletas | Cortesía: Team La Pandilla

Ana Delia, Jessica, Gabriela, Wendy, Fabiola, Esmeralda, Diana, Ericka y Berenice son nueve mamás jesuitas que en medio de la jornada de vacunación anticovid en el sur de Tamaulipas decidieron mostrarle a sus pequeños la bondad y la solidaridad, valores que consideran indispensables para su formación.

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Durante el martes 13 de abril acudieron a la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT) a enfrentar más de 200 botellas con agua fría y galletas. En su primera visita se percataron de que hay vendedores que han cuadruplicado el precio de bebidas y alimentos, aprovechándose así de los abuelitos mayores de 60 años que hacen fila por horas.

Son miles de adultos mayores los que llegan a estar formados hasta 12 horas. Foto: Alejandro del Ángel | El Sol de Tampico

Al percatarse que muchos de ellos pernoctan y pasan ahí la madrugada pusieron “manos a la obra” e invitaron a los trabajadores de Starbucks a sumarse a esta causa; por eso hoy a primera hora lograron repartir más de 300 cafecitos a los adultos que tuvieron una larga noche esperando su turno.

Entrevistada al respecto, Ana Delia Martínez informó que ella y sus amigas son madres de pequeños de ocho años que estudian juntos y buscan darles una lección de vida.

Invitaron a los trabajadores de Starbucks a sumarse a esta causa | Cortesía: Team La Pandilla

“Siempre se puede apoyar, la idea es que el sábado también se lleven aguas frías y paketines como a las 11:00 horas, que es cuando lo que el DIF ya se les bajó”, dijo.

Finalmente, exhortó a la comunidad tampiqueña a sumarse a esta labor, ya que toda ayuda sea poca o mucha resulta de gran utilidad para que los abuelitos puedan soportar las temperaturas y la espera en filas kilométricas para ser inmunizados.

Ana Delia Martínez informó que ella y sus amigas son madres de pequeños de ocho años que estudian juntos y buscan darles una lección de vida | Cortesía: Team La Pandilla

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