El amor entre madre e hijo, el esfuerzo y las ganas de vivir, fueron más que una terrible enfermedad llamada cáncer, durante 4 años tuvieron una batalla en contra de este mortal padecimiento, la cual parecen haber superado.
A mediados del 2015 el calvario para la señora María del Carmen Cruz Nery y su hijo Francisco Julian, apenas comenzaba, a ella le detectan Cáncer de Mama y 17 días después su hijo es diagnosticado con Linfoma no Hodgkin, un Cáncer del tejido linfático (este tejido se encuentra en los ganglios linfáticos, el bazo y otros órganos del sistema inmunitario).
“Empecé con mi problema en el año 2015, ahí fue cuando me detectan mediante una mastografía y el examen más a profundidad es donde me detectaron el problema. Fue muy duro, muy difícil al principio, porque no fue solamente es el paciente, si no se involucra toda la familia, y cuando apenas tenía 17 días de estar recuperándome cuando pasa lo de mi hijo”.
Señala que fue muy duro los primeros días, semanas, meses y años, debido a que tenía que cuidar a su hijo y cuidarse a ella misma “fue muy difícil porque él estaba en el seguro y yo tenía mis citas en el Seguro Popular, pero bendito Dios pudimos combinar las dos cosas, atenderlo a él y atenderme a mí, y si estuve con mi tratamiento y me fui con él para Monterrey para seguir su tratamiento, fue muy duro”.
María del Carmen, esbozando una sonrisa comenta que dentro de 10 meses, en agosto del 2020, terminará con su tratamiento y manda un mensaje a todas las mujeres “es muy importante que sea hagan sus mastografías que no dejen pasar tiempo, es que no tengo tiempo, es que no puedo porque tengo que hacer esto, tengo que hacer lo otro, es muy importante que tengan un tiempo para sí mismas, que se hagan sus mastografías, porque si hay algún problema, el cáncer detectado a tiempo es curable 100 % en las primeras etapas”.
Relata que gracias a que le fue detectado a tiempo, no tuvo que pasar por quimioterapias, solamente toma una pastilla por 5 años.
En el caso de su hijo comenta que pasó algo similar, le fue detectado a tiempo esta enfermedad y gracias a eso al igual que ella, está superando esta batalla “no se notaba a simple vista, empezó cansándose, el se fatigaba, mi hijo mayor se lo llevaba hasta las escolleras a correr y le aguantaba siempre hasta allá, entonces en una ocasión y el niño a mitad de camino se le hinca que le faltaba el aire y es ahí cuando ya notamos algo anormal y se le hizo un examen, el salió bien, pensábamos que estaba bien, pero comenzó a hincharse de la cara y ahí fuimos a dar en el seguro y ahí le hicieron los exámenes más profundos y fue cuando le hicieron biopsia”. Comenta que esto ocurrió cuando su hijo tenía apenas 14 años, actualmente tiene 19 y cursa los estudios de nivel medio superior.
María del Carmen Cruz
Nery, relata que el apoyo de la familia es fundamental para salir adelante de esta enfermedad, además de la ayuda recibida por fundaciones como “Casa Maka” en donde su hijo lleva el tratamiento y a la cual están sumamente agradecidos.