La fundación de Tampico estuvo llena de una especial mezcla gente que provino de diversas regiones, incluso hubo europeos que llegaron para establecerse y que fueron moldeando el destino del puerto que alcanzaría 100 años más adelante, un vertiginoso aforo de visitantes y trabajadores de todos los rublos y todos los estratos. Generándose así incluso la llegada de mujeres de diversos países que engañadas o por voluntad propia, ejercían la prostitución.
"A pocos años de abrirse el puerto, de inmediato se empezaron a instalar casas comerciales de diversas nacionalidades, especialmente europeas y estadounidenses, pero hay que recordar que el siglo 19 estuvo plagado de inestabilidades y guerras con potencias extranjeras, lo cual favoreció un ir y venir de población que sale y entra de México por Tampico".
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Señala el investigador Josué Picazo quien expresa que, sin embargo, se tiene más presente este flujo de personas de diversas nacionalidades durante las dos últimas décadas del siglo 19 y las primeras dos décadas del siglo 20.
Lo anterior empujado por las obras de modernización que se realizaban en esta parte del país durante el porfiriato, que atrajo e incluso una gran cantidad de personas del continente asiático.
Este enorme flujo de gente creó nuevas estrategias para un control y captación de impuestos, lo que generó los primeros registros de población ante la inmensa cantidad de población flotante que ingresaba al país por el puerto, quedando en el archivo histórico de la ciudad, una gran cantidad de libros con las listas de numerosos extranjeros entre ellos los que daban cuenta de las meretrices que llegaron a trabajar al puerto.
A Tampico llegaban de todas partes a trabajar, también a sus 'zonas de tolerancia'
Este auge financiero y la fama que empezó a tener Tampico a nivel mundial hizo que también arribaran al puerto personas a ejercer actividades que en algún tiempo convivieron de forma natural con los centros económicos y que aunque tenían una clasificación especial, se les procuraba una área y eran concentrados, en las llamadas “zona de tolerancia”.
Cada puerto entonces hacía su fama de acuerdo a la “zona de tolerancia” que existía en ellos y al ser Tampico una de las ciudades más ricas de América contó con un área donde personas de todo el mundo llegaron para buscar una forma de sobrevivir, algunas por voluntad propia, pero muchos y muchas engañadas por el olor del dinero y el negro sueño del petróleo.
¿Sabías que la canción Margaret nació en el Barrio de la Unión?
Entre los registros más peculiares está el realizado para el barrio de la Unión, donde se concentró toda la población que trabajaba en los giros negros de la ciudad, pues en varios se anexó una foto de personas de varias nacionalidades que ejercieron el “oficio más antiguo del mundo” y en algunos casos, tristemente alcanzaron fama mundial.
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Existe aún esos archivos donde nombres de mujeres francesas, inglesas, de Holanda, India, Japón, Portugal, Italia y Estados Unidos figuran como un testimonio, de que en medio del frenesí, hubo también esperanzas forzadas y sueños sin cumplir, largos viajes imaginarios y canciones tristes entonadas por la nostalgia.
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"Es en Tampico, que en el fondo de un callejón sin salida encontré significado en mi destino. Dicen que el dinero es inodoro, el petróleo está aquí para negarlo. Porque en Tampico cuando se evapora, el pasado vuelve y te hace vomitar", dice la canción de Margaret, famosa melodía que retrata aquellas vidas, entre las más felices o las más tristes de algunas mujeres que se llegaron a dedicar a la prostitución y de las que solo quedan sus nombres en los viejos archivos del puerto.
