La zona sur de Tamaulipas es una gran huerta de árboles demango, por lo que en temporada de este fruto los patios de grancantidad de casas se tapizan con este dulce producto.

La mayoría son mangos de río, aunque hay también los llamados“petacones” y en algunos casos japonés o “manguitas”, quelas familias no se dan abasto para poder consumirlos en sutotalidad por lo que muchos terminan desperdiciándose.

Por ello, desde hace varias décadas se ha acostumbrado quequienes tienen un árbol de mango en el interior de su terrenorecojan el fruto y lo pongan en la barda, en espera de que algúnviandante los tome.

La gran cantidad de este fruto genera abundantes moscas einsectos, por lo que se ha planteado la posibilidad que seestablezca un programa para hacer mermeladas o jaleas, sin quehasta ahora se haya concretado.

Es una tradición que ha pasado de generación en generación yactualmente siguen practicándose, permaneciendo los mangosamarillos, rojos o verde sobre las bardas de los domicilios enespera que alguien los tome y disfrute su siempre deliciososabor.

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