Por igual un bello rebozo huasteco que un colorido alebrijeoaxaqueño; un monedero de piel de Hidalgo o un trompo michoacanoforman parte de la amplia oferta de arte y artesanías nacionalesque se ofertan en el Colibrí Bazar.
Este es un esfuerzo de dos empresarias maderenses, GabrielaArvizu Andrade y Olivia Aguilar, quienes con el afán de promoverel consumo de los productos nacionales instalaron este sitio, justofrente a la presidencia municipal de la urbe petrolera.
Es un lugar reducido donde caben muestras representativas de laartesanía de más de una docena de Estados, en el que se exhibenpiezas verdaderamente bellas donde al tacto, a la vista y al olfatose siente a México.
Deja en claro que no es necesario viajar al extranjero, a losmalls de la zona sur de Estados Unidos, para comprar ropa dediseñador, ya que la ropa hecha por mexicanos alcanza la máselevada calidad y originalidad.
#Entérate La magia de las manos mexicanas ➡️https://goo.gl/4FLdw2Por igual un bello rebozo huasteco que un colorido alebrijeoaxaqueño; un monedero de piel de Hidalgo o un trompo michoacanoforman parte de la amplia oferta de arte y artesanías nacionalesque se ofertan en el Colibrí Bazar
Posted by El Sol de Tampicoon lunes, 20 de febrero de 2017
“Es ropa tradicional, accesorios hechos por artesanos, todo amano, que ha tenido gran aceptación en esta zona sur deTamaulipas”, dijo la joven emprendedora local.
Chiapas, Veracruz, Oaxaca, Puebla, Tabasco, Yucatán y nuestraregión Huasteca, desde Tamaulipas hasta Querétaro, se encuentranrepresentadas en esta tienda.
Bajo el precepto de “Lo artesanal no pasa de moda”, estaempresa local ha tenido gran aceptación en este municipiopetrolero y la región, ante el impulso al consumo nacional,regional y local.
DESDE LOS PUEBLITOS
Esta tienda especializada en venta de productos nacionalespretende mejorar las condiciones de los pueblos donde radican laspersonas que dedican horas, e incluso días, a hacer estas prendasúnicas.
Impulsan el comercio justo, eliminando los intermediarios, alhacer trato directo con los productores, “vamos a los poblados ya las localidades para evitar que las ganancias se queden enterceros”, aseveró.
En estos viajes se han enamorado de nuestro país, que ofreceuna gran y colorida variedad de objetos tanto para indumentariacomo para decoraciones interiores y exteriores.
“Nosotros apoyamos la artesanía mexicana, lo hecho a mano porartesanos mexicanos, llegamos a los pueblitos ubicados en losalrededores de las ciudades, para poder traerlo aquí ydistribuirlo”, expuso.
Es volver a lo básico, a las raíces, “muchas compras son pornostalgia, ya que les recuerda que sus mamás usaban tal o cualprenda, las jóvenes se dan cuenta que no sólo es de señoras sinoque pueden mezclarse con ropa casual e informal”.
DE ALEBRIJES A TROMPOS
Los estantes de esta tienda están plagados de tonos y colores,destellos que vienen de piedras como cuarzos, amatistas y conchanácar, así como olores de pomadas y ungüentos muy mexicanos.
Entre los objetos saltan a la vista unos alebrijes, “vienen deOaxaca, son piezas únicas e irrepetibles, e incluso diseños paraaretes y dijes”, así como el olor del café de Chiapas.
Las muñecas tradicionales mexicanas manufacturadas enQuerétaro, concretamente en la zona otomí; collares hechos porlas propias empresarias con tonos muy vivos; los huaraches quellegaron de distintos lares y los bordados en las blusas que sonverdaderas obras de creatividad.
Bolsos y monederos de piel curtidos en Chiapas e Hidalgo, loscuales tardan hasta dos semanas en hacerlos; un balero y un trompode los juguetes mexicanos de Michoacán. La mirada se queda colgadaen los "atrapa sueños", que con una magia propia son muydemandados por los más jóvenes; los anillos y aretes conformaciones hechas a capricho de las piedras y empotrados enalpaca.
Mientras que las calaveras de papel maché rematan en esteencuentro de culturas que demuestra que nada tenemos que hacer enel extranjero para vestirnos de calidad y, sobre todo,originalidad.