Su primer acto oficial no fue una ceremonia inaugural, ni mucho menos una sesión de Cabildo, fue el fungir como un albergue para una parte de la población afectada por un ciclón en 1933, asumiéndose tácitamente como la Casa del Pueblo.
Suscríbete a la edición digital de El Sol de Tampico aquí́
“Así se estrenó porque no había sido inaugurado y todavía se realizaron diversos trabajos en él y una vez pasada la contingencia se empezaron a instalar las dependencias del Gobierno que tuvieron muchos años y que han ido cambiando a lo largo del tiempo”, dijo el cronista de Tampico Josué Picazo.
El espacio que ocupa la actual biblioteca “Jesús Quintana” en la planta baja de este inmueble que no tiene comparación con otro en Tamaulipas, brindó cobijo durante varias semanas a los afectados.
Herencia de la influencia francesa que caracteriza a la zona centro, la Alcaldía de Tampico es una de las construcciones más emblemáticas de la ciudad al igual que la ex-Aduana.
Afirma que, de acuerdo a la información que se tiene, el palacio municipal de Tampico tuvo diversos contratos para su construcción, incluyendo uno donde se solventaban los costos diarios con la recaudación que salía de los nuevos mercados municipales que empezaron a funcionar en 1928.
“Entre los contratos que realizó el entonces gobernador de Tamaulipas Emilio Portes Gil con el arquitecto Enrique Canseco -que terminó de darle forma al palacio municipal-, nunca se determinó cuál fue el monto final, pero sí se habla que el arquitecto iba a estar pagando los gastos diarios de poco más de 750 pesos que generaba la obra”, añade.
El inmueble, al parecer inconcluso de tres pisos y un sótano, tuvo un costo estratosférico para la época estimado en 94 000 pesos, sin que exista un costo plenamente identificado.
Sobre si la obra está inconclusa debido a la apariencia que tiene en algunas áreas, el cronista de Tampico indicó que, aunque no se tiene un dato exacto sobre la circunstancia del porqué algunas partes del palacio municipal se ven inacabados, lo más probable es que debido a los tres ciclones que golpearon la ciudad en el momento en que iba a ser terminado, se pudo haber optado por poner en funcionamiento el inmueble quedando sin poder ser debidamente terminado.
El diseño de este inmueble de granito gris suave que cuenta con tres arcos imponentes, quien no pudo ver cristalizado el proyecto en su totalidad ya que el inmueble estaba contemplado para abarcar el perímetro de las calles Colón, Carranza, Díaz Mirón y 20 de Noviembre.
De acuerdo con datos del archivo histórico, señalan que Tampico y la zona sur en general, fueron azotadas por dos ciclones con diferencia de días, el 15 y 24 de septiembre respectivamente de 1933, que obligó a las autoridades a dejar de lado los reflectores y actuar en apoyo de la comunidad.
Aparte de albergar el poder municipal, la Alcaldía es el principal museo de Tampico ya que en sus paredes hay detallados murales de la historia de la región elaborados por el maestro Carlos Senz Rendón.
Además, es poseedor de elaborados diseños en su arquitectura interior que provocan la mirada obligada de los visitantes.
En el balcón principal se cuenta con una réplica de la campana de Dolores que fue donada en 1965 por Rodolfo Paleta, la cual solo se tañe una vez al año, la noche del 15 de septiembre como parte de la ceremonia del Grito de Independencia.
Datos relevantes
Iniciado en 1925 y nunca se inauguró formalmente.
Su costo superó los 94 000 pesos de la época.
Los días 15 y 24 de septiembre de 1933 la zona fue afectada por lluvias y huracanes por lo que se usó de refugio.
Sus muros reflejan la historia de la ciudad con pinturas del maestro Carlos Senz Rendón.
El proyecto original contemplaba toda la manzana entre las calles Colón, Carranza, Díaz Mirón y 20 de Noviembre. La falta de recursos lo impidió.
