La austeridad extrema que ha empobrecido como nunca las juntas locales y federales de conciliación y arbitraje y las limitaciones por la pandemia, tornan difícil que en el 2022 Tamaulipas cuente con el modelo juzgados laborales, pues esas instancias acumulan rezagos de años de miles de expedientes, que no podrán resolverse en los meses siguientes, afirmó Javier Ángel Ramos Turrubiates del Colegio de Abogados Laboristas.
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El también catedrático de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la UAT, señaló que la justicia laboral ha sido históricamente tratada por el gobierno como el “patito feo”, no dispone de presupuesto especiales y por siempre han carecido de recursos básicos y de profesionistas capacitados, lo que mantiene casi extinto ese derecho.
La primera etapa tribunales laborales ya funciona en ocho estados y para el nuestro esta previsto para el 2022, sin embargo es muy complicado que suceda, porque las juntas existentes no han recibido apoyos presupuestarios considerados en la transformación y es casi imposible acelerar la resolución de los miles de carpetas que acumulan años de atraso, para no heredarlos al nuevo modelo, que debe partir de cero, explicó.
“En las juntas federal y locales de Tampico, los litigantes deben cooperar para comprar papel o tóner para las impresoras, el personal trabaja en hacinamiento y las condiciones de las oficinas son precarias y con ello es casi seguro que el proceso de cambio lleve hasta 2 o 3 años”.
Para este año, la StyPS tiene marcado continuar en 14 entidades más y en el 2022 el plazo de la Federación es concluir el proceso que las juntas locales de conciliación y arbitraje dejen de ser entidades administrativas e incorporarse al Sistema Estatal de Judicial y las federales se integren al Poder Judicial de la Federación.
Para Tamaulipas, el plazo vence en el año próximo, pero es difícil que se cumpla, pues el gobierno piensa que las justicia laboral no es importante, a pesar de que la estabilidad laboral de una región se mide por el numero de huelgas o conflictos.
Agregó que la crisis de recursos en los tribunales existentes fueron empeorados por la pandemia, ya que prácticamente quedaron paralizados los procedimientos, a lo que hay que agregar la carencia de profesionistas, como sucede en la Junta Federal número 9 de Tampico, la cual cuenta con un actuario para hacer las notificaciones en casi medio centenar de municipios del norte de Veracruz y sur de Tamaulipas .
“La justicia laboral esta muerta y ahora la autoridad esta obligando a la conciliación, lo que muchas veces es preferido por la gente, pues en el caso de las demandas prefiere recibir algo pronto que arriesgar a obtener años después”.
MÁS DE 7 MIL LITIGIOS PENDIENTES
- El presidente de las Juntas Locales de Conciliación y Arbitraje de Tampico Miguel Haces Zorilla coincidió que será difícil concretar el año próximo la transformación a centros laborales, debido a que las limitaciones presupuestales.
- “No tenemos ni papel y son muchas las restricciones económicas y veo muy complejo que eso suceda”.
- Dijo que ese tribunal mantiene mas de tres mil carpetas pendientes y no podrá resolverlas en un plazo corto”.
- En la Junta Federal Especial informaron que concentran entre 3 mil y 4 mil expedientes que se encuentran en proceso de laudo, retrasados por la falta de personal y la pandemia.
