Diez jovencitas embarazadas de Altamira han recibido becas por parte de la Secretaría de Educación Pública (SEP) con el fin de que puedan utilizarlos en los tratamientos que siguen y con ello eviten abandonar sus estudios.
Además, de manera complementaria, el Gobierno de la ciudad, a través del Sistema DIF y del Instituto Municipal de la Mujer, brindan apoyo sicológico, orientación médica y nutricional, además de otras facilidades que buscan hacer menos complicada esta etapa que enfrentan las menores.
Karla María Mar Loredo, directora del Instituto, dijo que de acuerdo con las estadísticas que tienen la Secretaría de Educación y la Jurisdicción Sanitaria número 12, en Altamira existen aproximadamente 59 jóvenes entre 14 y 19 años en estado de gravidez, quienes han recibido apoyo integral del DIF, SEP y Secretaría de Salud para que sean atendidas en unidades médicas y además, no abandonen sus estudios.
En cuanto a menores de 15 años, dijo que sí existen varias identificadas, pero se requiere del permiso de los padres o tutores para poder brindarles información y orientación especial a fin de que puedan recibir los beneficios de los programas institucionales que están a su disposición.
La funcionaria comentó que en esta estrategia de acompañamiento a las menores embarazadas participan de manera coordinada el DIF Municipal y Estatal, Secretaría de Salud y Secretaría de Educación para lograr mejores resultados.
Mar Loredo apuntó que en el caso de quienes han recibido becas de estímulo a la educación estando en situación de embarazo, aunque el esquema ha sido cuestionado por algunos sectores, en los hechos constituye una importante herramienta de ayuda a las adolescentes y jóvenes que desean seguir estudiando y con esto aseguran su atención médica hasta el momento del parto, además de ayuda en instituciones de salud y educativas para lo que requieran.